"¿De dónde viene el agua?", se preguntan los ciudadanos que van por la rambla de San Andrés y se encuentran con charcos en el suelo o se mojan, incluso si pasan por allí en coche con la ventanilla abierta.

Después de observar atentamente se deduce que las mangueras del riego por goteo están picadas, y parece más un sistema por aspersión, con el inconveniente de que apunta hacia el asfalto y se desperdicia cada día mucha cantidad de agua.

Según los vecinos de este pueblo costero del Distrito de Anaga, este hecho se viene produciendo desde principios del pasado mes de mayo y, todavía continua.

En este sentido, fuentes de la Policía Local de Santa Cruz señalaron a este periódico que no constaba ninguna denuncia vecinal al respecto.

Parece extraño que los ciudadanos se sorprendan, pero, sin embargo nadie ha puesto una denuncias, para depurar responsabilidades, bien porque se trate de una avería o porque el hecho sea fruto de actos vandálicos, posibilidad por la que se inclinan todas las personas consultadas por este periódico.

No obstante, lo que si consideran los habitantes de San Andrés, es que la falta de mantenimiento y control de las zonas ajardinadas es bastante escasa, puesto que esta pérdida de agua y las consiguientes consecuencias sobre las personas que transitan por el lugar, llevan ya un tiempo sin una solución.

Además, llama la atención que lo que está ocurriendo sucede en un lugar de paso obligado en este barrio y muy transitado, puesto que, entre otras cuestiones, en los alrededores se encuentra la oficina de Distrito, ubicada en el Infobox, edificio ubicado justo al otro lado del cauce del barranco.

El desvío del riego, desde los parterres de los árboles hacia afuera, afecta a los vecinos que quieren sentarse en los bancos cercanos a los árboles, porque se encuentran con que están mojados. Por eso parece ser que se trata más de la "obra" de un "graciosillo" o de una "pillería" de quien quiere fastidiar y además hacer perder algo tan valioso como el agua.