El conflicto en el sector del taxi de Santa Cruz parece no tener una solución aparente o, al menos, ninguna que satisfaga a una mayoría razonable de taxistas más allá del rescate de 532 licencias sobrantes. Ayer volvió a quedar de manifiesto la desunión imperante en el sector, tal y como ya aconteció hace poco más de un mes en la asamblea que debía elegir a una única asociación para representar al sector.

El propio Juan Carlos López, presidente de la Asociación Taxistas de Canarias (ATC) y una de las plataformas convocantes del referéndum celebrado durante todo el día de ayer en el pabellón Pancho Camurria, se limitó a emitir su voto para, a continuación, desmarcarse de las otras dos asociaciones convocantes (la Plataforma Futuro del Taxi y la Asociación Teletaxi Isla de Tenerife) sin querer entrar en manifestaciones que pudieran agravar la desunión entre ellos.

El referéndum, al que acudieron 401 de los 1.087 taxistas con derecho a voto (el 37%) dejó claro que la medida de mayor consenso es la de bloquear el traspaso de licencias hasta que se consiga el ratio de 2,5 taxis por cada mil habitantes (340 a favor, 56 en contra, 4 en blanco y 2 nulos). La necesidad de realizar un estudio sobre la viabilidad económica del sector tuvo similares resultados (337 a favor, 51 en contra, 10 en blanco y 3 nulos).

En cuanto a las medidas de autorregulación sometidas a votación en el referéndum hubo disparidad de resultados. La decisión que se planteaba como fundamental no contó con el beneplácito de la mayoría de los titulares que se acercaron a emitir su derecho al voto. El 57% (229 votos) fueron contrarios a establecer, durante un mes y a modo de prueba, dos turnos de trabajo con 543 taxis cada uno. Sólo 159 votaron a favor a lo que hubo que añadir 13 votos en blanco.

A este resultado se sumaron ayer las manifestaciones del presidente de la Asociación de San Cristóbal de Trabajadores Autónomos del Taxi de La Laguna, Francisco Guanche, quien expresó que el sector del taxi de la ciudad de Aguere no había llegado a ningún acuerdo con la ATC con respecto a mancomunar el servicio en el área metropolitana aunque se hubiese aceptado establecer turnos.

Por el contrario, el 65% (234 votos) sí aceptó la posibilidad de modificar la ordenanza municipal para que cada taxi sea conducido por un único conductor (titular o asalariado). En esta iniciativa se emitieron 115 votos en contra, 11 en blanco y 1 nulo.

Ante los datos obtenidos parece claro que los taxistas priman, en época de crisis, la libre disponibilidad horaria frente al establecimiento de turnos, más si cabe cuando se tienen serias dudas sobre la rentabilidad del turno de tarde-noche en el que existiría una sobreoferta de taxis en horas de madrugada. Los resultados de la votación serán trasladados hoy al Ayuntamiento de Santa Cruz.