El área de Cohesión y Bienestar Social del Ayuntamiento de Santa Cruz y la Sociedad para la Promoción de las Personas Discapacitadas (Simpromi) han alcanzado un acuerdo por medio del cual se facilitará el ocio a las personas con movilidad reducida o discapacidad en la playa de Las Teresitas, habilitando un espacio para favorecer el baño de este colectivo durante los meses de julio y agosto.
Aunque este servicio se ha venido prestando en la playa capitalina en los últimos años, con una medida de 20 personas diarias, lo cierto es que Las Teresitas nunca se incluyó en los planes de Simpromi sobre accesibilidad en el litoral de la Isla.
Para este verano, sólo en los dos próximos meses, y desde las 10:00 a las 18:00 horas, se va a prestar un servicio de carácter humano y técnico para favorecer el acceso al baño de las personas con movilidad reducida, por medio de unas infraestructuras con las que se pretende también facilitar una asistencia a los familiares.
Así, en la entrada número 10 de la playa se habilitará un acceso, donde se ubicarán unas carpas, así como una plataforma central de madera más próxima a la orilla del mar, que estará equipada con hamacas y sillas, en una zona de Las Teresitas donde se localizan los baños y las duchas adaptadas.
Cada día, durante los dos meses que va a durar esta iniciativa, habrá un equipo de seis personas que se encargarán de la recepción y atención de los usuarios, compuesto por dos coordinadores y seis monitores, que prestarán asistencia en el baño, con la incorporación de las sillas anfibias.
El acuerdo nace con la vocación de que se prolongue durante todo el año, según reconoció el concejal de Cohesión y Bienestar Social, Ignacio González, que compareció en rueda una de prensa junto a la consejera delegada de Simpromi, Carmen Rosa García Montenegro.
A pesar de la puesta en marcha de este programa, que contará con un presupuesto de 60.000 euros, el resto de accesos a la playa han sido sobradamente criticados por su falta de adecuación a las necesidades de los usuarios con movilidad reducida, pues las rampas y los pantalanes de madera para acceder a la zona de la arena se han deteriorado con el paso del tiempo.
El dispositivo especial puesto en marcha el pasado fin de semana por parte del Ayuntamiento capitalino, la Autoridad Portuaria y Titsa ha generado una reducción de tráfico del 17 por ciento respecto al fin de semana anterior. Los datos del volumen registrado revelan que se ha pasado de 16.400 vehículos a 13.478 el último domingo, lo que unido a la adecuación de 215 plazas de aparcamiento en el Infobox y la recuperación de las ocupadas por la fiesta de San Juan han favorecido la vuelta a la "normalidad".