La capital tinerfeña se gastó 15 millones de euros en la celebración y gestión de todas las fiestas celebradas en el municipio durante el año pasado, justo en la edición que hacía acto de presencia de temida crisis económica, un dato que casi convierte en anécdota el millón que cobró en 2007 el bailaor Rafael Amargo por la dirección y producción de la gala del Carnaval.

De la liquidación oficial a la que ha tenido acceso EL DÍA se desprende que el Organismo Autónomo de Fiestas triplicó los cinco millones de euros que tenía de presupuesto para el año 2008. Las cuentas son el resultado de la suma de los citados cinco millones, más un suplemento de crédito que se realizó a mitad del ejercicio anterior y una deuda añadida de 9.161.579,40 euros.

De esos nueve millones, Fiestas facturó a Producciones Rolo, SL, 3.357.225,35 euros, a los que hay que sumar 920.718,55 euros adeuda a la Sociedad de Desarrollo en concepto de "promoción del Carnaval 2007 (80.054,35 euros) y 2008". En esas partidas se hacen constar dos abonos por un importe global de 304.500 euros para el musical Celia Cruz que trajo a Tenerife el responsable de la Gala, Jaime Azpilicueta, y que supuso un fracaso de público.

Una particular sangría supuso para Fiestas el montaje de casi un centenar acometidas eléctricas para cuantos barrios celebraron sus actos patronales por 1.409.091,73 euros. Resulta también llamativo los 1.170.617,60 euros que Fiestas facturó el año pasado a la Institución Ferial de Tenerife en concepto de alquiler y de instalaciones del Recinto Ferial. Y eso, sin contar la deuda de 1,4 millones que no está incluido en este presupuesto y que exige el Cabildo en concepto del alquiler del recinto ferial de ediciones anteriores.

Entre los pagos se incluyen 127.520,33 euros destinados al servicio de Bomberos durante el Carnaval, los casi 75.000 euros que costó el servicio de vigilancia, tanto en Carnaval (43.144,50 euros) como en el resto de actos celebrados durante el año y que fueron contratados a Securitas Seguridad España, o los 25.000 euros que se abonaron a la empresa Selimca por el servicio de limpieza. Muchos de estos gastos fueron provocados por la decisión del traslado de las galas y concursos a la explanada del Parque Marítimo.

También se hacen constar 268.990,93 euros que facturó Producciones Oye por la contratación de los artistas que intervinieron en la primera edición del exitoso Carnaval de Día.

En medio de tanto dispendio festivo, sirvan algunas anotaciones como notas de color. Y es que, por ejemplo, traer a Gorgorito para alegrar las Fiestas de Mayo a los más pequeños de la ciudad costó 8.550 euros el año pasado. También llama la atención que la organización se gastara casi 25.000 euros en las pizzas que sirvió a los 2.500 componentes de murgas, comparsas, rondallas y agrupaciones musicales y acompañantes en sus respectivos concursos, una cantidad insignificante si se compara con que otro 13.000 euros se destinaron al centenar de los miembros de los diferentes jurados. En el primero de los caso se contrató a TelePizza y, para los encargados de emitir los veredictos, a López Echeto Pastelera, SL..

Deudas heredadas de 2007

Puestos en contactos con fuentes del Organismo Autónomo de Fiestas recuerdan que la concejala popular Maribel Oñate asumió la organización de las actividades lúdicas y recreativas de la ciudad en julio de 2007. El primer presupuesto bajo el vuelo de gaviota fue en 2008. Ese año, Fiestas asumió medio millón de euros del pago del recinto ferial. Además de 1,7 millones de gastos extras ocasionados por el incremento del 10 por ciento de la subvención a todos los grupos del Carnaval, en cumplimiento del compromiso electoral que había asumido el PP en la campaña electoral. Dentro de ese mismo capítulo también incluyen la brillante celebración del Carnaval de Día o el sobrecosto que supuso sacar los actos del recinto ferial a la explanada del Parque Marítimo.

Responsables de Fiestas también traen al recuerdo los 1,5 millones abonados al mantenimiento de material utilizado en las celebraciones de los barrios, más las acometidas, las fiestas patronales y la adaptación a la nueva legislación en materia de seguridad eléctrica impuesta por Industria. A esto se suma 1,3 del descenso presupuestario realizado por el departamento que dirige Ángel Llanos y otros tres del sobre costo ocasionado por la celebración de la campaña de Navidad y Reyes de 2007.

En este desfase, los populares añaden los miles de euros que costó la celebración de la primera edición del 25 de Julio, cuando se representó en el Castillo Negro el desembarco de las tropas de Horacio Nelson.

Las fuentes consultadas del PP insisten en que cuando asumieron la organización de Fiestas afrontaron un déficit heredado de dos millones de euros. Según sus cálculos, el ayuntamiento se gastó en Fiestas 10,6 millones durante el último año en que CC gestionó las actividades lúdicas y recreativas de la ciudad, frente a los 9,3 millones que le costó esa misma gestión en 2008. Desde el organismo se asegura que ahora hay menos gastos y más ingresos, lo que permite sanear la gestión de Fiestas.

La mitad que en 2008

En el pleno del viernes, el grupo socialista preguntó a Fiestas sobre este desfase presupuestario. Lejos del reconocimiento de la deuda, el PP hizo una lectura más que optimista de su gestión. A su juicio, Fiestas gastó en el Carnaval 2009 un 51% menos que en 2008. Los populares hicieron una comparativa entre los costes de la última edición, cuando el Carnaval retornó al recinto ferial, y la edición anterior, que tuvo lugar en la explanada del Parque Marítimo.

El PP asegura que todo el Carnaval 2008, que no toda la gestión del área de Fiestas, costó 6.640.262 euros, lo que reconoce que sólo en dos meses (enero y febrero) se gastó todo el presupuesto anual.

Pero los populares no perdieron la ocasión para recordarle, incluso a sus socios de gobierno, que la fiesta de la máscara de 2009, tuvo un coste menor que la última que gestionó CC, en la que se invirtió 4.860.272 euros. Así, el Carnaval de Amargo, según el PP, costó un millón y medio de euro más que el de la pasada edición.

El equipo de Ángel Llanos concluye que Santa Cruz se gastó en el último Carnaval 736.575,63 euros en las subvenciones concedidas a los grupos, a los que suma 125.109,48 euros que repartió en premios. La celebración de los concursos supuso el capítulo más caro del presupuesto del Carnaval, que ascendió a 1.436.950,61 euros, a lo que se suman 461.989 ,28 euros abonados en concepto de alquiler al recinto ferial, una cuantía levemente inferior a los 477.871,32 euros que se facturaron en asuntos menores. A juicio del PP, con 3.238.577,32 euros se hizo gala de los últimos 20 años y se ha consolidado la recuperación del Carnaval. Otra cosa es que el presupuesto, según los datos a los que ha tenido acceso EL DÍA, se haya triplicado, hasta gastar un total de 15 millones durante todo 2008. ¿Quién dijo crisis?