El Hospital General de La Palma contará en 2017 con un aparato de resonancia magnética, una prueba de la que carece la Isla y que resulta indispensable para confirmar o descartar múltiples diagnósticos.

Esta adquisición se encuentra dentro de las previsiones del Servicio Canario de Salud, según se ha informado en la reunión del Consejo de Salud de La Palma celebrada ayer con la participación de miembros del SCS, Cabildo, ayuntamientos, sindicatos, asociaciones y colectivos vecinales.

La gerente de Servicios Sanitarios, Mercedes Coello, manifestó a esta redacción que el dinero destinado para la puesta en marcha de este servicio es de 1,1 millones de euros, y su previsión, "siendo realista", es que el aparato de resonancia magnética pueda estar en funcionamiento en el mes de octubre de 2017, aproximadamente, ya que hay que hacer obras en la sala donde se ubicará y sacar a concurso la adquisición del propio instrumento.

Coello es consciente de la importancia que esta dotación tiene para el sistema sanitario de La Palma, por ello fue una de sus primeras peticiones al consejero de Sanidad desde que accedió al cargo.

A propósito, hay que tener en cuenta que la sanidad pública tuvo que pagar más de 600.000 euros el pasado año por 3.864 resonancias realizadas a pacientes palmeros no solo en su propia isla sino también en Gran Canaria o Tenerife, a las que tuvieron que ser desplazados.

De igual forma, el SCS tiene previsto en 2017 la ampliación de la zona de ocio de Psiquiatría y de espera del Hospital de Día del centro hospitalario palmero, además de la ampliación y mejora de las urgencias del Centro de Salud de Santa Cruz de La Palma, la sustitución del equipo de radiodiagnóstico del Centro de Salud de Los Llanos de Aridane y la reparación de las humedades del consultorio local de Puntagorda.