El Gobierno canario ha dado diez días a Endesa para que le explique no sólo qué pasó en la central de La Palma que provocó el apagón del martes, la de Los Guinchos, sino también para que rinda cuentas de lo que se hizo en las cinco horas que tardó en reponer por completo el suministro.

La directora general de Industria y Energía de la comunidad autónoma, María Antonia Moreno Cerón, ha precisado hoy que, de momento, solo se ha abierto un expediente informativo sin prejuzgar cuál puede ser su resultado, aunque también ha reconocido que es probable que acabe en un procedimiento sancionador.

"Es fácil que así sea. La experiencia no dice que ya ha habido dos expedientes sancionadores por ceros eléctricos en La Palma (2009 y 2010), que se saldaron con multas de seis millones de euros, en un caso, y de tres millones en el otro", ha apuntado Moreno Cerón.

Si así fuera, Endesa se expondría a una sanción que puede llegar, en el peor de los casos para la compañía, a 30 millones de euros.

Moreno Cerón ha recordado que la propia eléctrica ha reconocido que el problema se produjo en su central de Los Guinchos, la única de la isla, por un fallo en un interruptor, y que se ha comprometido a hacer cuantas inversiones sean necesarias para que no se repita.

Así que, con independencia de lo que se derive del expediente que ahora se abre, el Gobierno de Canarias le toma la palabra a Endesa y "estará vigilante para comprobar que las inversiones que ha dicho que va a hacer, se hagan realmente", ha añadido la directora.