El grupo de gobierno en el Ayuntamiento de Tazacorte anunció ayer que las arcas locales se encuentran "en un pozo del que lamentablemente tardarán años en salir", una situación provocada "por la dejación de funciones" de Unión Bagañeta durante sus dos décadas de mandato, por lo que estudia presentar una denuncia ante los tribunales "para depurar responsabilidades".

El principal escollo al que se enfrentan las cuentas bagañetas es la aparición, cada cierto tiempo, de deudas con empresas en vía judicial, que el ayuntamiento en ningún caso tenía registradas y que alteran sus previsiones. La última es producto de una sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3 de Santa Cruz de Tenerife, que condena a la corporación bagañeta al pago de más de 126.000 euros por unas obras de 2004 que al parecer no fueron abonadas.

La actuación que se contrató y realizó fueron diferentes fases del inacabado complejo deportivo de El Puerto, con un importe inicial de 82,765,83 euros a los que ahora se suman otros 43.986,64 en intereses de demora (más los que correspondan hasta el pago efectivo de la deuda). Además, el ayuntamiento tiene que devolver más de 7.000 euros en avales bancarios, por lo que el pago final ascenderá a unos 133.000 euros.

La sentencia, con fecha de 2 de noviembre, se suma a otras similares a las que ya ha tenido que hacer frente la corporación de Tazacorte en los últimos meses, por una cuantía total superior al medio millón de euros.

La alcaldesa, Carmen Acosta, asume que estas sentencias, de obligado cumplimiento, abocan a las arcas municipales "a una situación de desamparo absoluto, ante la imposibilidad de afrontar el pago de las mismas sin pérdida de servicios básicos municipales". Una realidad "que perjudica seriamente a los ciudadanos que nada tuvieron que ver con decisiones irresponsables que durante años se adoptaron en esta administración".

Las reclamaciones judiciales ya resueltas, y las que aún están pendientes de tramitarse, "se corresponden con actuaciones, proyectos, bocetos e incluso simples compromisos que fueron encargados a diferentes empresas por parte del Gobierno que ostentó la responsabilidad de dirigir los dineros de todos los bagañetes durante dos décadas", apuntó la alcaldesa, quien señaló además que "todo este dinero al que ahora tenemos que hacer frente de forma inesperada y casi sin posibilidad de hacerlo, supone una continua fuga de un capital que es vital para hacer frente al pago de los servicios públicos que cada día reciben y demandan los ciudadanos de este municipio".

La alcaldesa informó de que el grupo de gobierno ha procedido a la remisión de todos estos expedientes administrativos a administraciones superiores "para que nos puedan auxiliar en la adopción de medidas correctoras para evitar las consecuencias de lo ocurrido en este ayuntamiento".