El Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma desperdició miles de euros recibidos con marco a los planes estatales de inversión local. Además de los 50.000 euros para la compra de una elevadora que dos años después aún guarda sin usar en un almacén municipal, tal y como denunció EL DÍA, la corporación capitalina destinó otros 230.000 euros para la construcción de un asadero y una pista de bici cross que prácticamente no se utiliza, en el barrio de Mirca.

Antes de su ejecución, allá por el año 2009, el gobierno municipal, liderado por el nacionalista Juan Ramón Felipe, anunció que el ayuntamiento "transformará la zona de Miranda, en el barrio de Mirca, en uno de los principales centros de ocio al aire libre de la capital". Las actuaciones contempladas, denominadas plaza de Miranda y parque de Miranda, se desarrollaron en el entorno de la Casa de la Cultura, creando "un espacio de ocio con asadero y zonas verdes de recreo, además de una pista de bici-cross y otra alrededor para actividades físicas", tal y como decía el comunicado municipal.

De lo ejecutado, lo que más utilidad está teniendo es el asadero, mientras que la pista de bici crooss, que supuestamente cumple con todos los requisitos para albergar competiciones oficiales, pasa prácticamente desapercibida para la población y nunca ha sido objeto de un torneo o encuentro de interés. Fuentes del lugar afirman que "a la pista alrededor (de cuatro calles) sí vienen algunas personas a caminar, pero las montañas de tierra que pusieron, poco uso tienen. ¿De verdad costaron 230.000 euros?".

Los dos proyectos se presentaron por separado, cada uno por un coste de 115.000 euros. Fueron realizados, al menos la pista de bici crooss, por la empresa KEC, que posteriormente saltaría a los medios de comunicación por la acusación al antaño concejal de Obras, Antonio Acosta, de la vinculación de su padre con la citada entidad. Un "caso" que terminó en la vía judicial. Sobre el terreno es complicado entender que el costo del asadero pudo ser tan elevado, al menos que los materiales fueran distintos a los habituales.