El Partido Popular aprovechó ayer una rueda de prensa dedicada al contenido del presupuesto del Cabildo para 2012 para desvelar los números rojos de la empresa pública Sodepal, en la que se mantendrán los gastos ahora con el gobierno compartido de Coalición Canaria y Partido Socialista, según consta en las cuentas que se aprobarán hoy en pleno.

Los consejeros del PP hicieron especial hincapié en los dineros destinados a programas y encomiendas de la empresa pública Sodepal, en la que, en vez de disminuir, se suman más gastos con nuevos proyectos. Eso, según Carlos Cabrera, pese a que "las últimas encomiendas realizadas a Sodepal se han demostrado que no sirven para nada y han supuesto en cuatro o cinco años más de un millón de euros de pérdidas".

Esto ocurre ahora, concreta el consejero, "bajo la permisividad del Partido Socialista", que ha pasado de cuestionar a diario a esta empresa cuando Coalición Canaria gobernaba en solitario "a ser ahora el máximo defensor de la misma". Al respecto, dijo Cabrera, "el PSC se ha sodepalizado".

Los populares mantienen que los datos ofrecidos por el Gobierno insular, que afirman un recorte de 500.000 euros en esta empresa pública, no son ciertos. Según sus cuentas, mientras en 2011 el Cabildo aportó 1.377.600 euros, en 2012 va a destinar 1.355.400, por lo que se mantiene el gasto.

Por otra parte, cuestionan la gestión de la Consejería de Turismo con el Patronato de esta área, considerando nula de pleno derecho la incorporación al presupuesto del Cabildo de las cuentas de un órgano sin que el mismo las apruebe. Según el PP, "para el consejero es un órgano residual que quiere eliminar por la vía de los hechos consumados. Sólo lo convoca para guardar las apariencias".

Para el presidente del PP, Asier Antona, los presupuestos de 2012 son "un brindis al sol" que "responde más a hipótesis que a realidades, ya que no puede cerrarse sin conocer las partidas estatales y regionales".

Los populares presentaron treinta enmiendas que no han sido aceptadas por el grupo de gobierno. La suma de esas enmiendas suponía la movilización de casi tres millones de euros de diferentes partidas en las que se darían de bajas los fondos previstos, principalmente en encomiendas y gastos de la empresa pública Sodepal, dependiente del Cabildo.

Esas enmiendas pretendían priorizar las inversiones en tres grandes bloques: el futuro centro sociosanitario de Las Nieves, en el Parque Cultural de Los Llanos de Aridane y en un plan para creación de empleo en La Palma.