La Isla tiene un representante en el Senado. "Solo" uno, que será nuevamente elegido en noviembre. Partido Popular, Partido Socialista y Coalición Canaria ya han decidido sus candidatos, de perfiles totalmente diferentes, incluso opuestos, que se enfrentarán en la campaña electoral para ser la voz palmera en una cámara siempre en entredicho.

Los nacionalistas presentaron a su candidato en un acto celebrado el pasado domingo en Los Llanos de Aridane. La apuesta estaba "cantada" desde hace tiempo. Después de los globos sondas propios de CC, el exalcalde llanense, Juan Ramón Rodríguez Marín, saltó a la palestra. Veterinario de formación, llegó a la política municipal de la mano de Juan Ramón Hernández Gómez, actual consejero regional de Agricultura. Como concejal fue el hombre de las cuentas, accediendo a la Alcaldía después de que su principal valedor decidiera aceptar un puesto en el Gobierno de Canarias.

Rodríguez Marín es directo. Si se quiere, brusco. No tiene "mano izquierda" en el trato, lo que perjudica a un político. Perdió en las elecciones de mayo la mayoría absoluta, aunque ganó con cierta claridad los comicios, después de enfrentarse a la plataforma contra las plantas de asfalto por falta de "cintura" y ser demasiado claro. Aunque el resultado final para los afectados seguramente será el mismo, la industria de aglomerado acabará funcionando en el Callejón de la Gata, otros partidos utilizaron argumentos más "convincentes". Eso de lo que presumen los "buenos" candidatos.

El ex alcalde llanense tiene la opción de "reengancharse" a un cargo público, aunque seguramente su objetivo es dirigir de nuevo algún día los destinos de su municipio.

Coello y sus impulsos.- A las elecciones llegará el PSC como defensor del "puesto". Hace casi cuatro años, con un tirón nacional de los socialistas muy destacado, Anselmo Pestana, por aquel entonces muy "tocado" como político, logró ser el candidato más votado, dejando en el camino a Manuel Pérez Rocha y Lázaro Brito. Ahora le llega el turno a Mercedes Coello Fernández-Trujillo. Nacida en 1958 en Santa Cruz de Tenerife, es médico de profesión y ha sido durante las dos últimas legislaturas diputada en el Congreso. Antes fue concejal en la capital palmera y consejera del Cabildo.

Coello es de impulsos. "Es muy difícil saber por dónde saldrá", aseguran personas que la conocen. Es capaz de volver "locos" a sus propios compañeros. Unos la acusan de ir "por libre", un actitud que otros defienden al considerar que es simplemente una defensa de sus ideas y su autonomía. Es activa, tal vez poco sosegada, pero pone todo de su parte para tratar de cumplir con sus objetivos. Si no es senadora, quizás tenga que dar un paso al costado en política.

De Haro, en la ola del PP.- Por su parte, el Partido Popular apuesta al Senado por la misma candidata que utilizó para el Parlamento de Canarias, María de Haro. Es licenciada en Derecho y ha sido directora general de Relaciones con la Administración de Justicia del Gobierno de Canarias y directora de la Escuela de Servicios Sanitarios y Sociales de Canarias, además de responsable del Área de Salud de La Palma.

Nunca ha tenido actividad política municipal y aunque está afiliada al comité del PP en Los Llanos de Aridane, reside en Tenerife. Aquellos que la conocen la definen como "una currante", que llega a todas las reuniones "con los temas bien preparados". En el trato es "demasiado amable", aveces incluso "parece tener doblez". Su conexión con el PP regional le ofrece ventaja en la denominación de puestos. Su peor momento como política fue su supuesta implicación en la denominada operación CATIS, desarrollada en Cádiz, Badajoz y Canarias, que desarticuló una organización dedicada a falsificar diplomas y certificados oficiales.

Si la "ola" del PP es tan grande como se prevé, debe ser la ganadora, pero...