La agricultura para el consumo propio ha registrado un espectacular aumento en la Isla durante los últimos años, después de que en décadas pasadas las pequeñas parcelas se hubieran abandonado en la misma magnitud que se producía un despoblamiento o abandono de las zonas rurales.

En el mapa de cultivos de la Isla que elabora el Gobierno de Canarias, con fondos del Cabildo Insular a través del convenio de infraestructuras de regadíos, se advierte de que la superficie destinada a huerto familiar, tal y como se entienden las pequeñas parcelas cercanas a las viviendas, ha aumentado en un 262 por ciento, destacando los cultivos de papas, hortalizas y pies de árboles aislados, principalmente templados, cítricos y subtropicales, porcentaje comparativo con el último informe de cultivos de La Palma elaborado en 2002.

Estos datos, facilitados a EL DÍA por fuentes del sector agrario, hacen reflexionar a los especialistas en la materia acerca de que la papa se está sembrando más para el consumo propio que para la venta o comercialización, un cambio de mentalidad que viene dado, entre otros condicionantes, por la necesidad de un mayor ahorro económico y, también, por mayores facilidades para el cultivo.

La recuperación de los huertos familiares ha sido posible gracias al mantenimiento del territorio, lo que no podría producirse en otras islas que apostaron decididamente por el turismo en un porcentaje elevado de su superficie.

Más cultivo y menos platanera.- Otros datos importantes que aporta el mapa de cultivos es el aumento en un 5% de la superficie global cultivada en la Isla, principalmente en los municipios de Tijarafe, Puntagorda, El Paso y Villa de Mazo, aunque es cierto que la platanera, uno de los pilares fundamentales de la economía insular, ha disminuido su superficie en un 7 por ciento, debido principalmente a las zonas urbanizadas y viales, como, por ejemplo, la vía de ronda de Los Llanos de Aridane y la urbanización de zonas como los Barros; y pérdida de zonas de baja producción.

También se ha producido aumentos significativos en cultivos subtropicales, concretamente en un 67%, destacando el aguacate, que precisamente ha ocupado las zonas altas donde estaban los plátanos y canteros de papas. Por el contrario, descienden los viñedos en cerca de un siete por ciento, principalmente en el municipio de Fuencaliente, mientras que curiosamente en la comarca Norte ha aumentado su superficie. Los cereales, cítrico y flores mantienen los cultivos con respecto al mapa elaborado hace ya siete años.

Desciende el cultivo de papas.- Aunque el nuevo mapa de cultivos afirma que la superficie cultivada de papas ha bajado en un 32% con respecto a 2002, hay que tener en cuenta que el dato es tomado en un momento puntual y se fija con respecto así existe o no cultivo. En este sentido, indicar que se localizó grandes terrenos de huerta limpia, tal y como se definen aquellas parcelas que en el momento de la visita se encuentra sin cultivo pero preparada (arada o desbrozada) para recibir alguno. En este caso, se entiende que una gran parte de la misma se destinara a la siembra de papas, por lo que es un descenso irreal.