Uno de los asuntos más recurrentes que siempre esgrimen los enemigos irreconciliables de Marruecos es la supuesta vulneración de los derechos humanos en el vecino país. Es sintomático y una abyecta estrategia del aparato propagandístico anti marroquí. Sobre todo, de los llamados "amigos del pueblo saharaui" pagados por Argelia que, siguiendo instrucciones de ese pseudo MLN denominado Frente Polisario, se inventan y propagan episodios de "torturas", "malos tratos" y demás para atacar a Marruecos y erosionar su imagen de país que respeta escrupulosamente los derechos humanos en todo su territorio: desde Tanger a La Güera, pasando por El Aaiún. Y es que la defensa a ultranza de los derechos humanos en Marruecos no tiene marcha atrás. ¿Puede decir lo mismo Argelia y el Polisario respecto a los campamentos de refugiados de Tinduf?

Según Mohamed Sabbar, secretario general del Consejo Nacional de Derechos Humanos (CNDH), "Marruecos registró grandes avances en el campo de los DD HH mediante la adopción de una Constitución en el año 2011"; añadiendo que ahora es necesario implicar de manera óptima a la sociedad institucional y civil. Durante una conferencia sobre "Los Derechos Humanos a raíz de la nueva Constitución", Sebbar señaló que el enfoque participativo y el trabajo colegiado prevaleció durante el proceso de desarrollo de la Ley Suprema, donde se asociaron los actores políticos y sindicales con el personal civil, cuya responsabilidad colegiada es aplicar todas las disposiciones de la nueva Carta Magna. A su juicio, "el nuevo texto constitucional tiene que estar a la altura a nivel nacional, regional e internacional".

La correcta aplicación de la Constitución permitirá a Marruecos "dedicar los mecanismos necesarios para la consolidación del Estado de Derecho y el cumplimiento por los distintos organismos del Estado marroquí de las tareas encomendadas a cada uno", en base a los principios de separación de poderes que propugnara Montesquieu; "el buen gobierno y la correlación entre la responsabilidad y la rendición de cuentas". Más allá de las reformas estructurales y legislativas, Mohamed Sebbar hizo hincapié en la necesidad de "desarrollar enfoques socioculturales capaces de aumentar la conciencia colectiva de la cultura de los derechos humanos". En segundo lugar abogó por un enfoque gradual en la reforma de la acción para consolidar los avances y garantizar que todos los ciudadanos puedan disfrutar de sus derechos constitucionalmente reconocidos.

Por su parte, el presidente de la CNDH, Driss El Yazani, declaró el pasado jueves en Fez: "Marruecos tiene experiencia en la promoción de los derechos humanos". En efecto, en la apertura de una reunión organizada por la Comisión de Derechos Humanos de Fez-Meknes para "el desarrollo de una estrategia participativa para la promoción de la cultura de los derechos humanos en las instituciones educativas de la región", El Yazami anunció que ese plan es parte de la dinámica global que enfrenta a Marruecos en la protección de los derechos humanos con la participación de organismos gubernamentales, instituciones nacionales, ONG y la sociedad civil. El presidente de la CNDH puso también de relieve la importancia de promover una cultura de los DD HH "como un mecanismo eficaz para afianzar las garantías legislativas, institucionales y administrativas".

Mientras esto sucede en Marruecos, a menudo se olvida lo que sufren los saharauis en los campamentos de Tinduf, en los cuales son retenidos contra su voluntad. Estos "refugiados" fueron en realidad secuestrados por el ejército argelino durante la Marcha Verde, alegando que "arriesgaban sus vidas" con la llegada del ejército marroquí. Además, incluso en el transcurso de las visitas familiares entre El Aaiún y Tinduf, la presión de Argelia y el Polisario es tal que muchos son obligados a quedarse, o se les impide regresar. Tal es el caso, de Salma Ould Sidi Mouloud, quién tenía prohibido regresar al campamento de Tinduf a ver a su esposa e hijos por haber anunciado su oposición al Polisario y expresar su apoyo a la propuesta marroquí de autonomía.

No se olvide que el conflicto artificial del Sahara Occidental ha sido creado por Argelia, y que las verdaderas víctimas son los saharauis secuestrados en Tinduf; a diferencia de los saharauis residentes en el Sahara, que reciben una asignación mensual por parte del Estado marroquí, están exentos del IVA y demás impuestos, y que los estudiantes saharauis reciben una beca de mayor cuantía que los demás estudiantes del Reino.

¿De qué derechos humanos estamos hablando, y dónde se conculcan especialmente?

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