La siega de trigo de Icod El Alto volvió a ofrecer una estampa costumbrista en la recogida del trigo con hoces y guadañas. Las huertas de Las Cuchillas sirvieron para ver los hatillos de cereal y después como los moyos quedan en la tierra a la espera de ser transportados. Otra de las imágenes espectaculares la ofrecen los dueños de las bestias, que cargan los moyos con tanto orden y equilibrio que asombran al público.

Y después llegan las mujeres con los balayos y los manteles para celebrar el almuerzo. Pero la recreación es la punta de lanza de lo que, hasta hace poco tiempo, parecía impensable. La superficie cultivada de cereal en Los Realejos casi se ha quintuplicado en apenas un año, según la estadística que maneja el área de Desarrollo Rural en el Ayuntamiento. La técnico Tesi Hernández así lo asegura. En apenas un año se pasó de 10,8 hectáreas a 48. Actualmente, este municipio produce el 60 por ciento de todo el trigo que se cultiva en el Norte de Tenerife. Este cereal se planta en Las Llanadas, Palo Blanco, La Ferruja, La Montañeta, La Zamora, El Jardín y Realejo Bajo. Y, dentro de Icod El Alto, en La Cabezada, Los Campeches, El Andén, El Llano y Las Cuchillas. Hernández explica que "la gente vuelve a valorar lo suyo" y plantar trigo "no obliga a estar detrás de él permanentemente, a la vez que el terreno está cuidado, se evitan plagas, te lo recogen limpio y ganas dinero". El Cabildo ofrece una segadora y empacadora a los productores y desde la Asociación de Cerealistas de Tenerife (Acete) se distribuye la semilla mejor para el suelo de la zona, la Barbilla. Y algún agricultor reconoce que lo ganado con el trigo nunca lo ha obtenido con las papas, según explica Tesi Hernández.