El grupo municipal de Coalición Canaria (CC) en el Ayuntamiento de La Victoria ha abandonado el pleno del Ayuntamiento celebrado este jueves tras los insultos proferidos por el alcalde socialista Manuel Correa, contra el portavoz nacionalista, Haroldo Martín, al que llamó "mala persona" y "loco", según informa CC en un comunicado, después de que el regidor municipal quisiera rechazar tres mociones de urgencia presentadas por los nacionalistas.

Según los nacionalistas, Manuel Correa, en un primer momento, "saltándose la legislación vigente", se posicionó contrario a permitir que se discutiera la urgencia de las propuestas del grupo de Coalición Canaria. Se referían, por un lado, a la mejora de las condiciones del Polideportivo El Grillar, que se encuentra, según los nacionalistas, en un estado de abandono "lamentable", y que pone en peligro, a diario, la integridad de sus usuarios (largueros de las porterías desoldados, verja rota y con las vergas por fuera, aros inutilizables, etcétera).

"Estas condiciones de las instalaciones --según señalan los nacionalistas-- han tenido ya consecuencias negativas, cuando recientemente un menor jugando a fútbol sala se cortó el rostro con el enrejado". Por otro lado, debido al inicio de la época de lluvias, solicitaban que "con la mayor celeridad posible" se ejecutase la colocación de sendas rejas transversales de canalización de las aguas pluviales en las calles Potigaiga y Barranco

Pino, debido a los daños materiales que generan en los hogares de los vecinos residentes las escorrentías.

El secretario general del Ayuntamiento, a petición de Haroldo Martín, tuvo que dejar claro que la legislación asistía a los nacionalistas y que la urgencia de las mociones debía ser valorada por el Pleno. Entonces, Correa pidió que se explicaran en bloque las tres mociones y se votara su urgencia, también en bloque, "saltándose de nuevo la normativa y el procedimiento habitual, que no es otro que el de tratar por separado cada una de las propuestas, al ser iniciativas diferentes".

Martín argumentó la urgencia de la moción referida al Polideportivo El Grillar y pidió que fuera votada. Al final fue votada la urgencia, pero marcando previamente Correa el sentido negativo que debía tener el voto de sus compañeros del equipo de gobierno, por lo que fue rechazada. A renglón seguido Correa volvió a exigir que la urgencia de las mociones restantes se tratara conjuntamente, volviendo a plantarse el grupo de Coalición Canaria.

Haroldo Martín acusó al alcalde de ser un "fascista, al tratar de imponer su voluntad, rechazar iniciativas legítimas y beneficiosas para el pueblo y no respetar la legislación vigente". A esto el alcalde del municipio le respondió que "usted lo es más, aparte de ser una mala persona, proferir locuras y ser una vergüenza para el pueblo". En ese momento la bancada nacionalista abandonó el Pleno.

Haroldo Martín señala que "este es el comportamiento habitual del alcalde. No respeta a los representantes de la oposición; el ninguneo y el desprecio son constantes. Sin embargo, lo que sucedió el jueves fue intolerable, la forma en la que me atacó trascendió lo político y entró en lo personal, actuando, además, con una agresividad desmedida que tuvo que ser contenida por sus propios compañeros de formación".