Podemos ha iniciado el proceso de financiación de las campañas electorales con la apertura de una línea de microcréditos, pequeños prestamos de los ciudadanos que son devueltos una vez celebradas las elecciones.

Según un comunicado de la formación que dirige Pablo Iglesias, ésta es la vía a la que ha recurrido la organización desde su fundación, así que mediante tales préstamos ha abordado las campañas electorales anteriores, empezando por las autonómicas y municipales de 2015.

Con ello, asegura Podemos, evita depender de los bancos, ya que no les pide préstamos para financiarse.

"Depender de bancos es una decisión política y una cuestión de voluntad. Frente a los 205 millones de euros de deuda que mantiene el resto de partidos, Podemos tiene deuda 0", sentencia la portavoz parlamentaria de Unidos Podemos, Irene Montero, en el comunicado.

Además, este modelo, según la formación morada, ha generado "un ahorro a las arcas públicas de 18 millones de euros", es decir, "la cantidad que resulta de la diferencia del dinero gastado y de la subvención íntegra que habría correspondido por los resultados obtenidos".

Añade Podemos que "en austeridad" nadie puede darles "lecciones", apunta la portavoz del grupo parlamentario.

Unidos Podemos, el grupo confederal que integran la formación de Montero y las confluencias, recibe una subvención del Congreso de 28.597 euros mensuales, que es la misma que la que perciben los demás grupos. A ello hay que agregar los 1.645 euros (también al mes) por cada parlamentario, que son 67.

Gracias a los 28.400 microcréditos suscritos con los ciudadanos, puntualiza la organización, Podemos ha sumado cerca de 9 millones de euros, devueltos casi en su totalidad.

Estos casi 9 millones recaudados para las distintas campañas fueron suscritos mediante microcréditos de 100€, 500€ y 1.000€, y su devolución íntegra y sin intereses ha finalizado "sin incidencias en cada una de las ocasiones", zanjan en su comunicado.