El lehendakari y candidato del PNV a la reelección, Iñigo Urkullu, ha advertido de que "el escenario hipotético de unas terceras elecciones está cada vez más cerca" y, en este sentido, ha considerado "un error el planteamiento de esperar a las elecciones vascas y gallegas". Asimismo, ha explicado que su partido está dispuesto a "hablar con todos" y ha señalado que tanto PP como PSOE "saben cuál es el planteamiento del PNV" y no le han "dado respuesta".

En una entrevista concedida a Antena 3, recogida por Europa Press, ha insistido en que los comicios vascos "no están mirando a posibles elecciones españolas" y ha considerado que "la situación en España es absolutamente grave".

El presidente vasco ha señalado que tanto PP como PSOE "saben cuál es el planteamiento de PNV", en referencia a la denominada ''Agenda Vasca'', y no le han dado "respuesta" ni Pedro Sánchez cuando aspiró a ser presidente del Gobierno ni el PP, con "agravante" en este último caso de que, durante cuatro años de mayoría absoluta, "el resultado de la relación" entre los ejecutivos central y vasco "ha sido nulo". "No ha habido atención ni intención de dar respuesta a planteamientos que hemos hecho desde el Gobierno vasco ni del PNV", ha censurado.

Urkullu ha manifestado que "no ha habido ni siquiera disposición a sentarse a hablar" y ha recordado que el Estatuto de Autonomía vasco es "una ley orgánica incumplida 37 años después" y el único del Estado "pendiente de ser reformado", así como que están "pendientes" la actualización del Concierto y la liquidación del Cupo desde 2008.

En el ámbito de paz y la convivencia, ha apuntado que "no hay ninguna disposición tampoco del PP a pensar que estamos en un nuevo tiempo y que necesita otras políticas adecuadas a los nuevos tiempos". "Y en el ámbito de profundización de autogobierno en su actualización, nada de nada", ha afirmado.

UN ERROR ESPERAR

Preguntado sobre si se sentiría más cómodo con Sánchez o Rajoy en la Moncloa, Urkullu ha recordado que el PNV ha pactado "con todos" tanto en Euskadi como en el Estado. "Nuestra disposición es a analizar con prioridad las situaciones que se dan en Euskadi en los que son nuestras aspiraciones refrendadas por una mayoría de la sociedad vasca y, atendido eso, nuestra disposición es a hablar con todos", ha asegurado.

A su entender, "el escenario hipotético de unas terceras elecciones está cada vez más cerca de que se cumpla". Por ello, considera "un error", teniendo en cuenta que "el cronómetro va avanzando cada vez más rápido", el planteamiento de "esperar" a las elecciones vascas y gallegas, "si no es porque el esperar obedezca a ver cuál es el resultado del PP y PSOE fundamentalmente en estas dos comunidades nacionales". Por su parte, ha asegurado que "no querría" que hubiera terceras elecciones.

UN PROBLEMA DE ESTADO

Por otro lado, ha lamentado que Ciudadanos "ha puesto el veto a la relación con los partidos nacionalistas" y ha advertido de que los partidos que aspiren a gobernar en el estado "tienen que ser conscientes de que tienen que dar una respuesta a los problemas de naciones que forman parte de un estado". Según ha indicado, "no es un problema de Cataluña o de Euskadi", sino "de Estado".

El dirigente vasco ha reiterado su "respeto más absoluto" a lo que está sucediendo en Cataluña. Según ha indicado, "no soy quién para dar consejos porque la realidad vasca y la catalana son absolutamente diferentes (...)" y además aplaude "lo que vengo escuchando" desde el presidente de la Generalitat y su partido en relación a "la voluntad de diálogo y de alcanzar un acuerdo".

Por su parte, ha afirmado, aspira a que conseguir "cada vez más cuotas de autogobierno en un doble concepto de construcción nacional y social, que van paralelas" y que "hay que conseguir con la adhesión de la mayoría de la sociedad vasca.

"Nosotros somos nacionalistas, nacimos con una finalidad a la que no renuncio, pero estamos en el siglo XXI en un contexto de la UE, en un proceso complejo de lo que debería ser el principio de subdidiaridad, y que lo que pueda hacer el pequeño no lo haga el grande, y en virtud de unos derechos históricos, la reivindicación de una actualización del autogobierno basada en el reconocimiento de una realidad nacional o de lo que pueda ser una relación de igual a igual en un sistema de garantías de bilateralidad efectiva", ha reiterado.

De este modo, ha explicado que apuesta por lograr "un acuerdo plural" en el Parlamento vasco y que "lo podamos elevar a las Cortes generales con un sentido real de pacto, que es el que se dijo en el 79 pero que luego no se ha cumplido porque ha habido una actuación unilateral de los gobiernos del Estado español".

Asimismo, ha considerado que su propuesta de soberanía compartida no se diferencia "en nada" del proyecto que presentó en 2004 el entonces lehendakari Juan José Ibarretxe, que "era una reforma siguiendo los cauces del propio estatuto de Gernika".

Frente a "la política de bloqueos, vetos, líneas rojas" tanto "personales, a partidos y en cuanto a los socios" del Estado, el presidente vasco ha subrayado que en Euskadi hay "una cultura del diálogo y el pacto".