El vicesecretario de Organización del PP, Fernando Martínez-Maíllo, ha dicho hoy que "está dentro de la normalidad" que haya "altos y bajos" en una negociación, en referencia a las quejas que ayer expresó Ciudadanos sobre el transcurso de las reuniones con el PP para la investidura de Rajoy.

Antes de participar en la jornada negociadora, ha señalado que otras negociaciones para un debate de investidura "se han hecho en dos o tres semanas y éstas en 4 o 5 días".

Tras asegurar que el PP es optimista, ha reconocido que "nadie ha dicho que sea fácil" este proceso, pero van a seguir trabajando y ha confiado en poder llegar a un acuerdo al final de esta semana.

"Y poder llegar al día 30 -ha continuado- con un acuerdo de investidura de al menos 169 o 170" diputados, ya que, ha recordado, hoy tienen una reunión con Coalición Canaria, en la que esperan llegar a un acuerdo.

Respecto a si llevaban alguna propuesta económica para las políticas que quiere desarrollar C''s, ha destacado que no se puede "de repente tirar la casa por la ventana" y no tener en cuenta los criterios y compromisos con Europa "y con el resto de españoles".

Ha recordado que uno de los puntos del acuerdo es cumplir los criterios de estabilidad presupuestaria "y a eso se compromete también Ciudadanos y creo que son conscientes de las limitaciones".

Para Maíllo, "hoy es un día importante", en el que se puede llegar a un acuerdo, porque "no existe ninguna cuestión insalvable", sino "diferencias" económicas y en la reforma institucional, en las que "tenemos diferencias pero traemos propuestas para desatascar la situación".

Ha señalado que hoy, al estar "prácticamente al final del proceso", se tratarán las "partes finales y también las más difíciles".

El PP trabaja en intentar formar gobierno, ha destacado Maíllo, quien ha indicado que pedirán al PSOE que no obstaculice su formación.

"Lo que más nos sorprende al PP -ha terminado- es que el PSOE siga pensando en las elecciones, que es lo que el resto de partidos estamos tratando de evitar".

A su juicio, es "una incoherencia, cuando estamos negociando un acuerdo de investidura, que el PSOE siga instalado en el ''no'' y ahora plantee un debate sobre las elecciones que creo que ahora no tiene ningún sentido".