España ha sido uno de los países que más ha caído en acción climática en el último año y se sitúa entre los que menos hacen para luchar contra el calentamiento, según el Índice de Comportamiento Climático presentado en la cumbre del clima por la Red de Acción Climática (CAN).

El Índice, que va por su décima edición, analiza y compara el comportamiento climático de los 58 países mayores emisores de CO2, responsables en su conjunto del 90 % de los gases contaminantes, y cuenta con la participación de más de 300 científicos expertos en energía de las naciones estudiadas.

Las variables escrutadas para poner nota son la evolución de las emisiones de los países, la eficiencia energética, la apuesta por las energías renovables y las políticas estratégicas de sus gobiernos para combatir el cambio climático.

De los 58 países, España queda en el puesto 41 por su comportamiento climático en el último año, 12 puntos más abajo que en 2014, y se halla en el grupo de países de acción climática "pobre", por detrás de aquellos cuyas políticas frente al calentamiento son calificadas de "moderadas", "buenas" o "muy buenas".

La puntuación total de España en este lista es de 52,63, aprobado raspado comparado con los países que más puntuación logran: Dinamarca (71,19), el Reino Unido (70,13) y Suecia (69,9), aunque superior a otros desarrollados con notas realmente malas, como Australia (36,5), Japón (37,2) o Canadá (38,7).

Su puntuación, relativamente buena en la evolución de sus emisiones y en eficiencia energética, cae en picado debido a la mala nota obtenida por la política climática del Ejecutivo y por su "mal comportamiento" con las energías renovables, explicó Jan Burck, director del informe.

"El resultado de España hay que atribuirlo a la falta de políticas de cambio climático a nivel nacional y a cómo ha revertido su apoyo a las energías renovables, con carácter incluso retroactivo", explicó Burck en respuesta a preguntas de Efe.

Agregó que la nota también "penaliza que el Gobierno actual no haya dado ninguna expectativa a los mercados de que vaya a volver a apoyar las renovables".

"España es un país que va al revés del mundo en acción climática. Fuimos pioneros en ella con las renovables, pero -el Gobierno- ha destruido los avances que tardaron años en hacerse", comentó en una entrevista telefónica Josep Puig, profesor de Energía de la Universidad Autónoma de Barcelona y uno de los autores españoles del estudio.

En España, añadió, "no existe política climática alguna más que lo que se hizo en el sector eléctrico en materia de renovables hace años".

"La nota obtenida por España es muy baja, tanto por las renovables como por la ausencia de políticas reales contra el cambio climático", subrayó.

A su juicio, España podría mejorar su puesto en el índice con actuaciones como el uso de biocombustibles para la maquinaria agrícola, la electrificación del transporte, sustituir el quemar gas y gasóleo para calentar agua con energía termosolar "y, por su puesto, apostando por las renovables".

Respecto a ese tipo de energía, los autores del estudio detectaron "una tendencia mundial positiva" y es que tanto en 2013 como en 2014 la nueva potencia renovable instalada en el mundo sobrepasó la suma de toda las nuevas instalaciones de otro tipo de energías (gas, carbón, nucleares, etc.).

Las "grandes inversiones en renovables" y la "menor quema de carbón" han dado lugar también a que los dos grandes emisores hayan mejorado su posición: China baja del puesto 50 al 47 y EEUU del 46 al 34.