El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha propuesto hoy prohibir a los diputados y senadores que desarrollen actividades privadas no relacionadas con sus funciones políticas y que, en el caso de las que sí tienen relación, como la participación en tertulias, no reciban ninguna remuneración.

Cuando aún no ha cumplido los cien días en el cargo, Sánchez ha acudido a un desayuno informativo en Madrid enarbolando la bandera de la "ejemplaridad" en la política y de la lucha contra el "terrorismo machista".

Sus propuestas ''estrella'': una iniciativa parlamentaria para que todos los diputados y senadores se dediquen con "exclusividad" a sus tareas de representación y el compromiso de hacer funerales de Estado a las mujeres que mueran a manos de sus parejas.

Respecto a la ampliación del régimen de incompatibilidades de los parlamentarios, ha dicho que, aunque su iniciativa no resulte aprobada, él la llevará a cabo en las filas socialistas.

También propondrá en el Congreso que los altos cargos y parlamentarios obtengan al principio y al final de su mandato un certificado digital expedido por la Hacienda Pública en el que conste que están al corriente de sus obligaciones fiscales y que especifique su patrimonio.

"España necesita políticos de primera, no dirigentes que cobren en B", ha proclamado el líder del PSOE, que ha asegurado que en el equipo que aspira a forjar "las puertas giratorias se cerrarán".

En su propósito de ser contundente con los corruptos -"se llamen como se llamen"-, ha confirmado que expulsará del partido y pedirá que devuelvan el dinero a los exdirectivos socialistas de Caja Madrid que hayan hecho "uso fraudulento" de las tarjetas de crédito "opacas" que, según investiga la Fiscalía Anticorrupción, gestionó la cúpula de la entidad entre 1999 y 2012 por valor de 15,25 millones de euros.

"Vamos a pedir explicaciones, a abrir una investigación y todos los que son militantes del PSOE tendrán que explicar el uso de esos recursos, les vamos a pedir que devuelvan el dinero usado y, si hay uso fraudulento, vamos a expulsarlos", ha advertido.

Sobre la posibilidad de llegar a un acuerdo con el PP en materia de regeneración democrática, Sánchez ha señalado que, si el grupo popular acepta su oferta de elegir por consenso al próximo director general de RTVE, entenderá que su "disposición para el acuerdo es verdadera".

También ha apuntado que le "suena bien" la idea del exministro de Justicia Alberto Ruiz-Gallardón de reducir de más de 7.000 a 22 el número de aforados.

Aunque ha defendido que los expresidentes deben tener un "espacio de reconocimiento" tras su paso por la política, como Ruiz-Galalrdón y Joaquín Leguina en el Consejo Consultivo de la Comunidad de Madrid, ha insistido en que se quedó "desagradablemente sorprendido" al conocer que los miembros de ese órgano cobran 8.500 euros al mes y ha abogado por "revisar eso".

En su discurso, Sánchez ha hecho hincapié en que quiere "llenar de contenido" y demostrar con "hechos" el cambio que promete y ha renovado su compromiso de que todos los miembros de la ejecutiva del PSOE y de los grupos parlamentarios publiquen su declaración de bienes en la web del partido como forma de "rendir cuentas" ante los ciudadanos.

"Debemos romper con la política de la mentira, del maquillaje y el engaño", ha reivindicado Sánchez, tras argumentar que "quien pretenda salvar su partido a costa del país, daña al país y a su partido".

A ese respecto, ha reprochado al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy y al de la Generalitat, Artur Mas, que estén empeñados en "confrontar" y en "subrayar sus diferencias" por sus "miedos electorales".

Tras la suspensión de la consulta del 9N, ha confiado en que Mas "cumpla la ley" y ha pedido a Rajoy que "dé un paso más allá y responda con la política" a la crisis de Cataluña.

En su discurso, Sánchez ha perfilado un proyecto para España basado en una doble transición política y económica; la primera, sustentada en una reforma constitucional y la segunda en la reindustrialización del país, la derogación de la reforma laboral, el incremento del salario mínimo y la inversión en Educación hasta el 7 % del PIB.

Arropado por numerosos cargos de su partido y algún representante del PP, como la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, Sánchez ha sido presentado por el exseleccionador nacional de baloncesto ''Pepu'' Hernández, con quien coincidió en el Estudiantes.

En los valores de ese deporte el líder del PSOE ha querido simbolizar su modelo: el de los políticos que estén dispuesto a "sudar la camiseta" y a "pensar menos en las siglas y más en el equipo".