Mercè Gironés, exmujer de Jordi Pujol Ferrusola, el primogénito del expresidente catalán, ha llegado a las 15.30 horas a la Audiencia Nacional para responder por sus cuentas en el extranjero ante el juez Pablo Ruz, que sigue interrogando a su exmarido después de más cinco horas.

El hijo de Jordi Pujol comparece desde las 10.40 horas ante el juez Ruz, que le ha imputado delitos de blanqueo y fiscales tras comprobar movimientos sospechosos de divisas durante ocho años (2004-2012) en trece países, que rondan los 32 millones de euros.

A las 16.00 horas está citada Gironés por los mismos delitos y la mujer ha llegado al tribunal media hora antes en un taxi, vestida de negro y con gafas de sol.

Según fuentes jurídicas, su exmarido está prestando la declaración en castellano en una sala de la planta sexta de la Audiencia Nacional ante la presencia del juez Ruz; la teniente fiscal Anticorrupción Belén Suárez; un representante de la Abogacía del Estado; su abogado y el de Gironés.

Este caso comenzó a investigarse a partir de una denuncia presentada en enero de 2013 por Victoria Álvarez, expareja de Pujol Ferrusola, que le acusó de hacer continuos viajes a Andorra con mochilas repletas de billetes.

El juez llamó a ambos a declarar cuatro días después de que el expresidente de la Generalitat Jordi Pujol confesara, el 25 de julio en un comunicado, que había mantenido oculta una fortuna en el extranjero, que vinculó a una herencia de su padre.

El magistrado basa la imputación de Pujol Ferrusola y su exesposa en informes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía (UDEF) y de la Agencia Tributaria sobre el movimiento de divisas efectuado por los dos durante ocho años (2004-2012) en trece países, entre ellos Suiza, Islas Caimán, Gabón y Liechtenstein, y que ronda los 32 millones de euros.

La UDEF detalló también en un informe las cantidades millonarias que el hijo mayor de Jordi Pujol recibió a cambio de supuestos servicios prestados a varias empresas adjudicatarias de obra pública, dinero se sospecha respondió en realidad a comisiones por interceder en las adjudicaciones.