Los tres principales partidos canarios -PP,PSOE y CC- han conseguido concentrar más del 90 por ciento de los votos emitidos en las últimas tres elecciones europeas, una marca que quieren defender en esta convocatoria frente al auge que apuntan las encuestas de otros partidos medianos y pequeños.

La máxima concentración del voto entre los tres partidos canarios en las elecciones al Parlamento Europeo se produjo en la convocatoria de 2004, cuando se repartieron el 95 por ciento de todos los votos emitidos.

En la última convocatoria de 2009, el tripartidismo canario alcanzó el 92 por ciento de los votos emitidos y en 1999 llegaron al 91 por ciento.

En 1994, primera convocatoria en que Coalición Canaria se presentó a los comicios como tal, los tres partidos no anduvieron lejos de estas marcas, y reunieron el 87 por ciento de los votos emitidos.

Este fenómeno de concentración del voto ha seguido también una tendencia creciente en las elecciones europeas cuando se considera solamente a los dos principales partidos españoles, PSOE y PP, que han pasado de reunir el 49 por ciento de los votos emitidos en los comicios de 1984 (entonces el PP como AP), al 78 por ciento en 2004 y al 76 por ciento en 2009.

Si en lugar de considerar el porcentaje de votos recibido por los tres partidos respecto a los votos emitidos se considera respecto al censo, la concentración del voto en PP, PSOE y CC fue sustancialmente más baja en las últimas elecciones de 2009, apenas un 36 por ciento, debido a la elevada abstención.

En esas elecciones el 60 por ciento de los votantes canarios no acudió a las urnas, y aun así la participación fue superior a 2004, cuando la abstención superó el 63 por ciento, la más alta registrada por el momento en unas elecciones europeas en Canarias.

En ese año, en el que sólo el 36 por ciento de los votantes canarios votó, los tres principales partidos fueron respaldados por algo más del 34 por ciento del censo.

Mejores tiempos corrían para el tripartidismo en 1999, cuando PP, PSOE y CC obtuvieron el favor del 54 por ciento del censo, gracias a que en esa ocasión la abstención no superó el 40 por ciento.