Triana Martínez, de 35 años, en prisión provisional por la muerte de Isabel Carrasco, observó desde la ribera del río Bernesga cómo su madre, María Montserrat González, de 55, abatía a tiros el pasado 12 de mayo a la presidenta de la Diputación de León, según fuentes de la investigación.

Así se desprende de la declaración de una testigo que presenció toda la secuencia del crimen, cometido cuando la presidenta de la Diputación de León y del PP provincial atravesaba una pasarela peatonal sobre el río Bernesga.

Esta testigo declaró que la joven no estuvo en ningún momento sobre la pasarela y los veinte metros que separan el inicio del puente con el lugar exacto en el que fue abatida Carrasco, los recorrió en solitario su madre.

Añadió que Montserrat González, que llevaba la cara cubierta con un pañuelo azul, siguió a Carrasco por la pasarela y cuando ésta se encontraba hacia la mitad le disparó por la espalda a escasa distancia. La testigo sostiene que a causa de ese disparo Carrasco se desplomó y recibió otros dos tiros en el suelo.

Por otro lado, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, opinó ayer que el caso de los comentarios injuriosos y amenazantes vertidos en redes sociales tras el asesinato de Carrasco sirvió para concienciar a la ciudadanía. El Juzgado de Instrucción número 1 de Gandía (Valencia) dejó ayer en libertad provisional sin fianza al tercer detenido, un joven de 20 años, por amenazar a políticos en Twitter y le imputó los delitos de proposición para delinquir y amenazas de muerte.

La Policía Nacional, por último, imputó a un chico de 17 años por verter amenazas contra la alcaldesa de Logroño, Concepción Gamarra, del PP. Al ser menor, se le tomó declaración en calidad de imputado, pero no de detenido.