La Bolsa española ha inaugurado julio con una revalorización del 1,36 %, en una semana en la que se ha visto animada por las palabras del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, que ha dejado la puerta abierta a una posible bajada de los tipos de interés en la zona euro.

Los tipos podrían mantenerse "en el nivel actual o más bajo un periodo de tiempo amplio", dijo el presidente del BCE, que añadió que "la política monetaria será expansiva el tiempo que sea necesario".

Todas estas promesas provocaron una reacción positiva en los mercados europeos, no solo en la renta variable, también en el mercado de deuda, donde la prima de riesgo española se ha vuelto a situar por debajo de los 300 puntos básicos.

Las palabras de Draghi llegaron como un bálsamo para los mercados, después de que a principios de semana se vieran fuertemente afectados por las dudas que de nuevo suscita Grecia y Chipre, además de la crisis política desatada en Portugal.

La renuncia en menos de 24 horas de dos ministros portugueses, -el de Finanzas y el de Exteriores- desataba una crisis de gobierno en el país, que provocaba de inmediato un alza en las primas de riesgo de los países periféricos, que, en el caso de España, llegó a superar los 315 puntos básicos.

A este hecho también se unía la rebaja que aplicaba Moody''s a la banca nacionalizada -Bankia, Novagalicia y CatalunyaBanc-, a las que incluso cuestionó su viabilidad.

Moody''s también advertía de que la debilidad de la economía española, que no comenzará a recuperarse hasta mediados de 2014, seguirá afectando negativamente al perfil crediticio de la banca, pese a que ha adoptado medidas de refuerzo de su capital y están mejor preparados para asumir pérdidas.

La crisis de Portugal y las dudas que despertó en el mercado la situación de Chipre y de Grecia repercutieron en el resultado de la subasta de deuda que llevó a cabo el Tesoro español el jueves, en la que aunque logró colocar 4.003 millones de euros en bonos a tres y cinco años, tuvo que elevar el interés un 6 % en ambas denominaciones.

Al igual que la Bolsa española, la de Londres se ha revalorizado en la semana el 2,58 %, en tanto que la de París lo ha hecho el 0,40 %, y la italiana, el 1,93 %.

Por el contrario, el mercado de Fráncfort ha bajado en la semana el 1,93 %, aunque la mayor caída ha correspondido al portugués, que se ha dejado el 2,69 %.

Dentro del IBEX 35, la mayor subida de la semana ha correspondido al Banco Sabadell, que ha ganado el 19,61 %; seguido de FCC, el 14,31 % y CaixaBanck, el 12,54 %.

En el lado de las pérdidas ha destacado ACS, con un recorte del 5,90 %.

La Bolsa española comenzará la próxima semana por debajo de los 8.000 puntos tras cerrar el viernes con una caída 1,67 %, después de que el miedo se apoderase otra vez de los mercados tras conocerse unos buenos datos de empleo en Estados Unidos que hicieron temer la retirada temprana de estímulos por parte de la Reserva Federal.