El vicepresidente ejecutivo de Exceltur, José Luis Zoreda, ha considerado este viernes que el sector turístico en España ha tocado fondo, aunque ha avisado de que no habrá un crecimiento significativo este año, debido a la debilidad de la demanda interna, que supone el 50% de los turistas en el país.

"No llegaremos a tasas de crecimiento positivo, pero frenaremos la caída", ha manifestado Zoreda en declaraciones a los medios en el III Encuentro Internacional de Turismo de Iese en Barcelona, donde ha pedido un esfuerzo conjunto del Gobierno central y las comunidades autónomas para reflotar el turismo interior.

Ha avisado de que el sector turístico "no es indemne a la crisis y no lo aguanta todo", ya que el buen comportamiento del turismo exterior no compensa la caída del turismo doméstico, por lo que muchas compañías están sufriendo y han tenido que hacer recortes y ajustes.

Ha lamentado que el empeoramiento de los resultados de las empresas turísticas ha coincidido en gran parte con el incremento de los impuestos, sobre todo el IVA y las tasas aeroportuarias.

EMPLEO.

Ha constatado que 2012 fue el primer año en los últimos diez en que el sector turístico en España destruyó empleo, y ha augurado que este año aún no habrá grandes tasas de contratación porque "todos los empresarios tienen ciertos temores y por tanto tienen muy ajustadas sus plantillas" en previsión de que las expectativas puedan no mejorar.

"No hay expectativas de que el empleo vaya a mejorar de forma muy sustancial", ha augurado Zoreda, aunque ha confiado en que a medida que vaya acercándose la temporada alta se irán incrementando los índices de contratación.

BUEN POSICIONAMIENTO

Zoreda ha asegurado que Barcelona es la ciudad líder en turismo urbano en España y que es la que está "capeando mejor" la crisis, por lo que ha confiado en que sea uno de los motores de recuperación del sector turístico.

Ha afirmado que Cataluña también tiene algunas zonas vacacionales de la costa que están respondiendo bien a la crisis, al igual que algunas partes del País Vasco, Baleares y Canarias, que serán las cuatro comunidades que liderarán la salida de la crisis, ha remachado.