La participación en las elecciones gallegas era del 42,49 por ciento hasta las 17.00 horas, 6,85 puntos menos que en los comicios de 2009, mientras que en el País Vasco a esa hora había acudido a votar el 47,2% del electorado, lo que supone 1,6 puntos menos que hace tres años.

La Xunta de Galicia ha informado de que la participación ha bajado en las cuatro provincias de esta comunidad en relación a la anterior convocatoria electoral, cuando a esa hora había depositado su papeleta el 49,34% de los ciudadanos llamados a las urnas.

A la vista de las dos últimas citas electorales, la Xunta cree que la participación podría situarse en torno al 60 por ciento o ligeramente por encima, según ha explicado el secretario general de Presidencia, Valeriano Martínez.

En el País Vasco, la participación se ha situado a las 17.00 horas en el 47,2%, una cifra inferior al 48,8% registrado en los comicios de 2009.

Por provincias, Guipúzcoa ha sido la única en la que el número de electores que han acudido a las urnas se ha incrementado (0,93 puntos), en tanto que han bajado en Vizcaya (3 puntos) y Álava (1,61 puntos).

Para el viceconsejero vasco de Interior, Raúl Fernández de Arroyabe, en este descenso ha podido influir el tiempo lluvioso que se está registrando a lo largo de toda la jornada en la comunidad vasca.

Aunque también ha señalado que han podido influir "otros muchos factores" en esta evolución del voto, pero no ha querido analizar las posibles causas a la espera de que se sepan los resultados definitivos.

Esta jornada electoral, que comenzó con la apertura de los colegios electorales a las 9.00 horas de la mañana, está transcurriendo con normalidad, según han explicado los gobiernos vasco y gallego.

Los candidatos vascos, en los primeros comicios autonómicos sin la amenaza de ETA, han sido más madrugadores que los gallegos.

La tranquilidad es la tónica de la jornada, salvo el incidente registrado cuando el lehendakari, Patxi López, ha acudido a su colegio electoral de Bilbao y ha sido acosado por un grupo de personas con pancartas en favor de los presos de ETA.

El equipo de seguridad del candidato socialista les ha invitado a abandonar el recinto y ha habido algún forcejeo, aunque sin ir a mayores.

Tras votar junto a su mujer, López ha afirmado que aunque algunos sigan con "viejos ''tics'' totalitarios", estas elecciones son las primeras en las que se elige "un Parlamento Vasco en total libertad".

El mismo mensaje del candidato del PP, Antonio Basagoiti, quien, después de votar en Bilbao, ha subrayado que "aquel que no vote debe saber que otros están votando por él".

El presidente del PNV y aspirante a la Lehendakaritza, Iñigo Urkullu, ha ejercido su derecho al voto en la localidad vizcaína de Durango, donde reside, y, en un jornada lluviosa, ha llamado a los vascos a "mojarse".

Por su parte, la candidata de EH Bildu, Laura Mintegi, también ha subrayado al votar la importancia de la convocatoria porque "por primera vez, después de mucho tiempo, se verá la fotografía" real de la sensibilidad política de los vascos, ya que en 2009 la izquierda abertzale no concurrió a los comicios en aplicación de la ley de partidos.

En San Sebastián, el candidato de UPyD, Gorka Maneiro, ha destacado que los vascos son "libres" y el futuro depende de los ciudadanos, y en Bilbao el cabeza de lista de Ezker Anitza-IU, Mikel Arana, ha confiado en llenar las urnas de "votos de rebeldía, de votos que exigen un cambio".

Más de 1,7 millones de vascos están llamados a las urnas hoy, en las décimas elecciones autonómicas de Euskadi, donde al inicio de la jornada se han retirado algunos carteles y pasquines a favor de Bildu y en contra del PP y del PNV en colegios de Álava.

En Galicia, son cerca de 2,7 millones los ciudadanos con derecho a elegir el nuevo Parlamento autonómico (casi 400.000 residentes en el extranjero) y la jornada también está transcurriendo con normalidad.

El candidato del PP a la reelección, Alberto Núñez Feijóo, ha asegurado que él y toda Galicia se "juegan mucho" en estos comicios y se ha mostrado seguro de que la ciudadanía gallega "no se va a equivocar" en la decisión que tome.

Tras depositar su voto en Vigo, Feijóo se ha confesado "descansado por fin": "Qué mejor que decidan los gallegos sobre el futuro de uno y no unos pocos, sino cuantos más, mejor".

Fuentes de la Policía Nacional han identificado a cinco personas que se han manifestado con una pancarta en defensa del gallego ante el colegio al que ha acudido el presidente de la Xunta.

El candidato del PSdeG-PSOE, Pachi Vázquez, después de votar en O Carballiño (Ourense), ha estimado también que en el escrutinio de esta noche "no habrá fallo", porque "los ciudadanos aciertan siempre" y ha estimado que hoy es el día "de la ilusión, de la esperanza".

Por su parte, el candidato del BNG, Francisco Jorquera, ha apelado a una participación "masiva" en unas elecciones que pueden suponer un "cambio de rumbo" para la comunidad.

El cabeza de lista de Alternativa Galega de Esquerda (AGE), Xosé Manuel Beiras, que este año abandonó el BNG, ha declarado que podría "morir feliz incluso antes de saber el resultado de esta noche" porque, pase lo que pase, "ha merecido la pena".

La incidencia más significativa se ha registrado en el Colegio de Lavacolla de Santiago de Compostela, que ha amanecido con pintadas y un candado en la puerta, aunque ha sido abierto sin problemas.