El presidente de Cantabria, Ignacio Diego (PP), apostó ayer por "repensar" la autonomía y el país y advirtió de que "de poco sirve" la declaración de derechos "en cientos de artículos" legales o en el Boletín Oficial "si la economía real carece de recursos materiales".

Diego se pronunció así en su discurso en el acto institucional del Día de Cantabria, que se celebró en el Parque Conde San Diego de Cabezón de la Sal, donde se pusieron las bases de la creación de la comunidad autónoma cántabra. El presidente regional abogó por "repensar" Cantabria y España y subrayó que "la senda de la racionalización" que se ha emprendido por las administraciones es "irreversible", pues lo contrario resulta "infinanciable". Diego consideró que, por un lado, hay que "repensar la autonomía de Cantabria", lo que, a su juicio, "pasa inexorablemente" por desarrollar unos modelos sanitario y de servicios sociales que sean sostenibles, y una educación "de excelencia", con "un compromiso personal de todos los sectores implicados.

Por otra parte, en su opinión, hay que "encuadrar" a Cantabria "en una nueva manera de pensar España" que "afronte" los problemas del país y "convoque voluntades hacia un proyecto de vida en común".

El presidente cántabro aseguró que el Estado de las Autonomías "no es una fórmula impracticable" ni "un capricho" de la Transición, pero avisa de que la estructura autonómica "exige" eficiencia y que en los tres niveles estatales "exista la cultura del buen gobierno, de la transparencia y de la moderación de los comportamientos".