La medida planteada por el Ministerio de Sanidad de suprimir más de 450 fármacos de la financiación pública no ha sido bien acogida ni el sector médico ni en el farmacéutico. Mientras la Federación de Asociaciones de Defensa de la Sanidad Pública rechaza la propuesta y pone en cuestión su ahorro, la Organización Médica Colegial (OMC) advierte que la decisión supondrá el aumento de los costes de estas medicinas.

Las asociaciones han reaccionado así después de que se anunciara que la ministra de Sanidad, Ana Mato, va a proponer a las Comunidades Autónomas, en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) de este miércoles, una lista de 456 fármacos susceptibles de ser excluidos de la financiación pública y que, según los cálculos de su departamento, supondría un ahorro neto para el Sistema Nacional de Salud (SNS) de 440 millones de euros.

En concreto, esta lista de medicamentos de uso común propuesta por Sanidad recoge fármacos para 18 dolencias de carácter leve como son la tos o la congestión nasal asociada a la gripe y al resfriado, así como estreñimiento, antidiarréticos, antihemorroidales, varices, psoriasis o ansiedad leve.

Tras conocer la noticia, el secretario general de la Organización Médica Colegial (OMC), Serafín Romero, ha criticado la propuesta del Ministerio de Sanidad y ha avisado de que aumentarán los costes de estos fármacos.

"El grupo de medicamentos terapéuticos acompañan y palían los síntomas de lagunas patologías especiales como, por ejemplo, para los estreñimientos secundarios o para los pacientes con demencia o con algún problema neurológico algunos laxantes estarían más bien que indicados o financiados porque pueden tener un valor añadido al tratamiento", ha recalcado Romero.

Asimismo, el secretario general de la OMC ha avisado que las Comunidades Autónomas van a tener "dificultades" a la hora de saber cómo van a seguir financiado medicamentos que a nivel nacional no se financian mientras, a su vez, sufren una "disminución" de su masa salarial de profesionales sanitarios.

CUESTIONAN SU AHORRO

También la Federación de Asociaciones de Defensa de la Sanidad Pública se ha pronunciado sobre la desfinanciación de fármacos expresando su rechazo. "La medida ha sido poco meditada y es técnicamente muy deficiente", ha manifestado el presidente de este organismo, el doctor Marciano Sánchez, que además pone en cuestión el ahorro que dicha medida podría provocar en el SNS.

Según el criterio de Marciano, la aprobación de la iniciativa no haría que se redujeran los costes, pese a los casi 500 millones de euros que el Gobierno estima ahorrar. "La propuesta señala que existe una posibilidad bastante razonable de que lo que produzca sea el uso de otros medicamentos financiados que son mucho más caros. Se podría gastar más", sentencia, en declaraciones a Europa Press.

Con todo, el representante de Defensa de la Sanidad Pública considera que Sanidad está teniendo un planteamiento "exclusivamente economicista y fruto de la improvisación. No sabemos si dentro de un mes habrá rectificaciones como ya ocurrió con el Decreto Ley", ha señalado.

A las críticas contra la medida se ha sumado también la asociación FACUA-Consumidores en Acción, que asegura que el Gobierno y las comunidades cometen un "gravísimo atentado" contra la salud de los ciudadanos al querer aplicar la desfinanciación de tales medicamentos.

Por este motivo, la organización ha anunciado una campaña de recogida de firmas a través de su web para protestar contra esta medida. Para su difusión en las redes sociales ha escogido el lema ''He firmado con @facua contra el #medicamentazo, porque mi salud vale más que cualquier banco'', y advierte de que esta medida es un paso más en el "proceso de desmantelamiento de la sanidad pública".

Según advierten, dejar de financiar medicamentos de uso común provocará que muchos médicos receten como sustitución fármacos que sí estén financiados, indicados para dolencias más graves y generalmente más caros, y que la industria farmacéutica suba el precio de los medicamentos que dejarán de financiarse.

Además, "muchos usuarios tenderán a la automedicación, ya que el ahorro económico dejará de ser un elemento para acudir al médico", y mientras otros "dejarán de acudir al médico para medicarse ante síntomas menores", lo que "no sólo los agravará, sino que provocará además que patologías más graves pasen desapercibidas".

"LEVES NO SIGNIFICA QUE SEAN DE BAJA UTILIDAD TERAPÉUTICA"

Igualmente, la vicepresidenta de Relaciones Institucionales de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE), Isabel Vallejo, lamenta que el Ministerio de Sanidad haya propuesto a las comunidades la desfinanciación de fármacos sin tener en cuenta que "leves no quiere decir que sean de baja utilidad terapéutica".

"Que sean medicamentos para síndromes leves no quiere decir que sean medicamentos de baja utilidad terapéutica", ha explicado en una entrevista a Europa Press, al tiempo que ha recordado que, aunque dejen de financiarse, estos medicamentos siguen contando con el "respaldo" de todos los profesionales sanitarios, "tanto médicos que los van a prescribir, como de los farmacéuticos que van a respaldar con su consejo".

No obstante, Vallejo señala que para valorar el alcance de la medida hay que esperar a la confirmación de los medicamentos que se verán afectados, aunque adelanta que contraerá nuevamente la demanda de medicamentos, al igual que lo hará la puesta en marcha del copago farmacéutico que entra en vigor el próximo uno de julio.