La juez que investiga los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) fraudulentos, Mercedes Alaya, imputó ayer al exdelegado de la Consejería de Trabajo en Sevilla Juan Rodríguez Cordobés los delitos de prevaricación, malversación de fondos públicos y obtención fraudulenta de ayudas. Rodríguez, que fue delegado de Trabajo de 1999 a 2000, percibió 36.000 euros como prejubilado de la empresa Calderinox, en la que nunca trabajó.

Horas después, la juez imputó los delitos de obtención fraudulenta de ayudas, contra la hacienda pública, malversación y prevaricación a Luis Llorente Herrero, un "intruso", según se denomina a los falsos prejubilados.