El incendio que desde el martes arrasa los alrededores de Rasquera (Tarragona) ya ha calcinado 2.400 hectáreas y sigue sin control, según informaron fuentes de los Bomberos de la Generalitat catalana a última hora de la noche de ayer. Entretanto, el consejero de Interior, Felip Puig, destacó que sigue "sin control". "Aunque los frentes norte y sur están contenidos, el derecho es más frágil y avanza hacia la localidad de Tivenys", destacó, al tiempo que subrayó que "el fuego ha saltado la montaña, aunque en su descenso la velocidad es menor".