La Fiscalía de Vizcaya ha archivado la investigación abierta contra el dirigente del PSE Melchor Gil, cuñado del lehendakari, Patxi López, "por no haberse acreditado hechos constitutivos de delito".

Según han informado hoy fuentes de la Fiscalía, el fiscal jefe de Vizcaya emitió un decreto el pasado 6 de mayo en el que ordenaba el archivo de la investigación sobre los ingresos que permitieron a Gil la compra de un chalé en Castro Urdiales (Cantabria).

Gil, vicesecretario general del PSE-EE vizcaíno, fue investigado por la Hacienda Foral de Vizcaya, dirigida por el PNV, al considerar que sus ingresos entre 2005 y 2009 no encajaban con los gastos de la compra del chalé.

Hacienda entendía que había ocultado en sus declaraciones de la renta 419.000 euros destinados a la compra de la vivienda y pidió a la fiscalía en marzo de 2010 que investigara a Gil por fraude fiscal.

El Ministerio Público archivó la denuncia por entender que no había fraude fiscal, ya que para ello las cantidades defraudadas tienen que sobrepasar los 120.000 euros anuales, y en enero de este año la Hacienda Foral volvió a instar a la fiscalía a investigar el asunto, que ahora ha sido archivado.

En el decreto de archivo de la causa, el fiscal relata los pasos dados para aclarar el origen del dinero de Gil y constata, según fuentes del Ministerio Público, que el vicesecretario del PSE vizcaíno recibió un préstamo "por una cantidad importante" por parte de personas que declararon que se trataba de un dinero que el dirigente socialista debía devolver.

En su escrito, el fiscal concluye que no hay elementos para pensar que dicho préstamo tenga relación con la actividad política o pública de Gil y deduce que no hay datos que acrediten la comisión de un delito.

El archivo de la causa por la Fiscalía no cierra la vía judicial, ya que la Diputación Foral de Vizcaya tiene la posibilidad de denunciar a Gil directamente en el juzgado, aunque las mismas fuentes han considerado que es "improbable" dado que el fiscal entiende que no hay datos para imputarle ningún delito.

La investigación sobre los ingresos de Gil fue publicada el pasado 12 de marzo por varios periódicos que recibieron en sus redacciones el expediente sobre el dirigente socialista en un sobre anónimo enviado por mensajero.

Gil presentó entonces una querella por la vía penal, admitida a trámite, por la filtración de "documentos personales y confidenciales" y denunció el caso ante la Agencia Vasca de Protección de Datos.

Además, Gil acusó al PNV de "utilizar" la Hacienda vizcaína en su "estrategia de acoso" al PSE y a su "entorno más cercano".

El portavoz de los socialistas vascos, José Antonio Pastor, sugirió que tras la filtración del caso a los medios había una "intencionalidad política" por parte de la Diputación.

El ente foral, que negó estas acusaciones, inició una investigación interna para aclarar si la filtración había partido de la Hacienda vizcaína y se personó en la causa abierta en un juzgado de instrucción de Bilbao por esta filtración.

Consultada por Efe, la Diputación vizcaína no ha querido pronunciarse hoy sobre el archivo de la investigación y se ha limitado a afirmar que "hizo lo que tenía que hacer" cuando puso en conocimiento de la fiscalía sus sospechas sobre los ingresos de Gil.

El PSE ha comunicado que no dará a conocer su opinión hasta mañana, en una rueda de prensa en Bilbao.