Grupos formados por varias decenas de indignados se han concentrado esta mañana en Barcelona ante cuatro oficinas de distintas entidades bancarias en protesta por los desahucios de familias de sus viviendas y por la negativa de los bancos a la denominada "dación en pago".

Estos grupos, de cerca de un centenar de indignados en cada caso, se han concentrado en la Plaza Urquinaona, la calle Pelai, la Plaza Antoni Maura y la Avenida Paralel, convocados por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, la Plataforma Auditoría de la Deuda, "Democracia Real Ya" y los "Yayoflautas".

Estas son las primeras acciones que ha programado el movimiento del 15M durante el día de hoy en Barcelona para conmemorar el primer aniversario de sus movilizaciones.

Uno de los grupos, formado por un centenar de personas, se ha situado ante una oficina de Caixa Penedès ubicada en el número 5 de la calle Pelai, en la que no han podido entrar al encontrarse con las puertas cerradas.

Los indignados han repartido panfletos en los que indican que Caixa Penedès, junto a otras tres cajas que formaron el banco Mare Nostrum, "acumulan 915 millones en ayudas públicas en forma de créditos del Estado avalado por emisiones de participaciones preferentes".

Los concentrados han proferido diversos lemas, como "Qué pasa, no tenemos casa", "Sí se puede", "No se entiende gente sin casas, y casas sin gente".

Por su parte, otro centenar de personas se han dirigido hasta la sede de Catalunya Caixa, en la plaza Antoni Maura, para protestar también por los desahucios de familias de sus viviendas, lo que han hecho haciendo sonar ruidosamente unas cacerolas.

En este caso, la entidad ha dejado pasar a unos representantes de los indignados, entre ellos Ada Colau, portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, que pretenden negociar la dación en pago de sus viviendas de dos afectados por desahucios.

Otras acciones similares han sido convocadas por el movimiento del 15M en la Avenida del Paralelo y en la plaza Urquinaona.

Paralelamente, grupos de indignados se han dirigido a primera hora de la mañana a algunas emisoras de radio, donde han acordado "in situ" con los responsables de los informativos matutinos poder leer un comunicado en el que hacen un llamamiento a los ciudadanos a que salgan a la calle y ofrezcan resistencia al "modelo capitalista imperante".

"Si no protestamos activamente contra este sistema injusto capitalista, no sólo lo padeceremos nosotros, sino también nuestros hijos", reza el comunicado, en el que los indignados concluyen que "es hora de decir basta y plantarnos de verdad".

En el manifiesto, los indignados también insisten en que no se sienten representados ni por políticos, ni por empresarios, ni por jueces y denuncian que cuando los mercados se han visto amenazados por las protestas en la calle les han mandado a sus "sicarios", en referencia a policías, fiscales y jueces, para intentar amedrentarles.

En este sentido, los indignados han aprovechado su presencia en las ondas en los programas matutinos de más audiencia en Cataluña para exigir la puesta en libertad de la secretaria de organización de CGT, Laura G., que permanece encarcelada tras ser detenida por quemar falsos billetes en una caja de cartón ante la Bolsa de Barcelona durante la jornada laboral del 29M.