El fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, aseguró ayer que no les consta ninguna presión de las defensas a la Fiscalía en el caso Nóos y dejó claro que no puede haber acuerdos de conformidad en este momento, porque no ha acabado la instrucción de este asunto.

Torres-Dulce se pronunció así, ante los rumores de contactos con la Fiscalía para llegar a un acuerdo que evitara el ingreso en prisión del yerno del rey, Iñaki Urdangarin, y de su socio Diego Torres, imputados por un supuesto caso de corrupción.

"Procesalmente, hablar de temas de conformidades es absolutamente prematuro y, por tanto, no tiene realmente ningún sentido", sentenció.

Mientras, el grupo parlamentario de Izquierda Plural está preparando una batería de preguntas en el Congreso para aclarar cuál ha sido el papel del Rey en los "negocios" de su yerno, así como la actuación de la Fiscalía en el caso Nòos.