El PP ha conseguido una victoria histórica en Andalucía, aunque muy lejos de la mayoría absoluta esperada, por lo que una más que probable alianza entre las fuerzas de izquierdas impediría que Javier Arenas fuera el nuevo presidente de la Junta. La subida de tres escaños de los populares, que han ganado con 50 diputados, ha contrastado con los resultados del partido liderado por José Antonio Griñán, que se ha quedado finalmente con 47, 9 menos que en los comicios del 2008. Por su parte, el candidato de IULV-CA, Diego Valderas, ha doblado la representación de su partido, al pasar de 6 a 12 parlamentarios, y tiene la llave de la próxima Presidencia de Andalucía. El presidente del PP-A y candidato a la Presidencia de la Junta de Andalucía, Javier Arenas, ha logrado, al cuarto intento, un triunfo histórico al ganar por primera vez unas elecciones autonómicas, pero el resultado ha sido insuficiente para gobernar en solitario. Los populares han conseguido superar su techo electoral en unos comicios autonómicos alcanzando el 40,66 por ciento de los votos y 50 escaños, tres más que en los comicios celebrados hace cuatro años, en los que la formación que lidera Javier Arenas ya logró sus mejores resultados hasta entonces.

Sin embargo, el PP supera por apenas un punto de ventaja a los socialistas, frente a los 8,5 que logró el PP en las generales del 20N, y se queda a cinco diputados de la mayoría absoluta debido al espectacular avance experimentado por IULV-CA, que duplica sus representantes hasta lograr los 12 escaños. De hecho, los populares han sido la fuerza más votada en cinco provincias, pero solo han ganado escaños por Cádiz, Huelva y Sevilla.

Dulce derrota del PSOE

Finalmente el retroceso del PSOE-A ha sido mucho menor del que vaticinaban las encuestas y los triunfos del PP-A en las últimas elecciones municipales y generales, aunque la derrota supone el peor resultado de la historia en unas elecciones autonómicas tras una legislatura marcada por la marcha de Manuel Chaves y con especial protagonismo del escándalo de los ERE irregulares en su tramo final. Los socialistas han perdido parlamentarios en cinco circunscripciones: uno en Almería, en favor de IU; dos en Cádiz, en favor de PP y IU; uno en Córdoba, en favor de IU; uno en Huelva, en favor del PP; dos en Jaén, uno en favor de IU y otro por población; y dos en Sevilla, uno en favor del PP y otro en favor de IU. Además de su tradicional feudo de Sevilla, el PSOE-A también se ha mantenido como fuerza más votada en Huelva y Jaén.

Con independencia de la baja participación, diez puntos inferior a la registrada en 2008, los resultados avalan la decisión de Griñán de optar por la convocatoria de elecciones autonómicas en solitario, ya que la diferencia del PP-A sobre el PSOE-A en las generales del 20N se situó en 8,5 puntos, siete más que los alcanzados en los comicios de ayer, domingo. Los socialistas tienen abierta la posibilidad de un gobierno de coalición con IULV-CA, fórmula que ya aplicaron con el Partido Andalucista (PA) tras los comicios de 2000 y 2004. Por su parte, IULV-CA irrumpe de la mano de Diego Valderas como fuerza decisiva en el nuevo Parlamento andaluz al duplicar su cifra de diputados, alcanzando los 12 escaños, todos obtenidos a costa del retroceso del PSOE, con el que podría alcanzar un pacto de gobierno como los que ya mantuvo en ayuntamientos como Sevilla, Córdoba o Jaén.

La federación de izquierdas alcanza representación por las ocho provincias, incluidas Almería y Jaén -donde no ha tenido en la última legislatura-, y alcanza dos parlamentarios en Cádiz, Córdoba, Málaga y Sevilla.

El significativo avance de UPyD en las urnas, que ha alcanzado el 3,35% de los votos frente al 0,62% de hace cuatro años, resulta insuficiente para alcanzar representación en el Parlamento andaluz. El PA continúa su particular travesía del desierto con el proyecto que lidera Pilar González y seguirá fuera de la Cámara autonómica por segunda legislatura consecutiva al lograr el 2,51 por ciento de los votos, algo por debajo de los de 2008.

Primeras valoraciones

La secretaria general del PP y presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, aseguró anoche que el Gobierno de Mariano Rajoy seguirá con su política de reformas a pesar de los resultados que ha cosechado el partido en Andalucía y Asturias, ya que, según ha dicho, son las medidas que necesita el país para salir de la crisis. Sobre si Javier Arenas se quedará los próximos cuatro años en la oposición, indicó que el candidato "popular" ha hecho un "magnífico trabajo". "A partir de aquí hablaremos ya de todo lo que quiera hablar Javier Arenas pero la fuerza del PP como líder en el Parlamento andaluz es innegable". El presidente de la Junta de Andalucía y candidato a la reelección, José Antonio Griñán, expresó ayer tras el resultado que el PSOE andaluz es un partido "increíble, que nunca se arruga" y que ha sido capaz de recuperar buena parte de la confianza que perdió en los últimos comicios generales.

El coordinador federal de IU, Cayo Lara, descartó ayer que pueda repetirse en Andalucía lo ocurrido en Extremadura, donde la abstención de sus tres diputados permitió un gobierno del PP en esa comunidad, y avanzó que utilizarán sus escaños para que no gobierne el popular Javier Arenas.

El diputado electo, líder de la CUT-BAI y alcalde de Marinaleda (Sevilla), Juan Manuel Sánchez Gordillo, dijo tras los resultados que sería "un error" pactar con el PSOE porque "no se puede apoyar un barco que se hunde" y ha apostado "más por las políticas, que por las consejerías".

En Andalucía, a la luz de los resultados, el PP ha podido ser el más perjudicado por la alta abstención, ya que ha recibido 450.000 votos menos que en las últimas elecciones generales (1,98 millones de andaluces votaron al PP el 20 de noviembre y ahora lo han hecho algo menos de 1,55 millones).