El empresario José María Ruiz-Mateos será detenido en caso de no comparecer por tercera vez en un juzgado de Palma, mientras que sus seis hijos varones no podrán salir de España y tendrán que presentarse cada quince días en sede judicial, según sendas resoluciones dictadas ayer por dos jueces de la capital balear.

El patriarca de los Ruiz-Mateos estaba citado ayer a declarar en dos juzgados de Palma por dos querellas relativas a sendas estafas en la venta de unos hoteles.

Una de las citaciones provenía del Juzgado de Instrucción número 3, que investiga la querella del empresario Francisco Miralles por una supuesta estafa de casi 14 millones de euros en la venta del hotel Eurocalas, situado en Calas de Mallorca.

El empresario jerezano no acudió ya en otra ocasión a declarar alegando enfermedad, cosa que hizo también ayer, y ante esta circunstancia la jueza María Pascual le volvió a citar este mes y le advirtió de que en caso de que no acuda se ordenará su búsqueda y detención.