El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha decidido tomar personalmente las riendas de la economía, que contará con seis de los doce ministerios, al optar por encabezar él mismo la Comisión Delegada para Asuntos Económicos y prescindir de una vicepresidencia en este ámbito.

Rajoy ha preferido recuperar la división en dos departamentos del Ministerio de Economía y Hacienda, tal y como ocurría en el anterior ejecutivo del PP, presidido por José María Aznar, aunque ahora introduce en el segundo la competencia de Administraciones Públicas, algo que hasta ahora no había sucedido.

Renueva también la confianza en dos de los principales miembros del equipo económico de Aznar, al poner a Cristóbal Montoro al frente de Hacienda, la cartera que ya dirigió entre 2000 y 2004, y a Luis de Guindos como encargado de Economía, área en la que ya fue secretario de Estado y que pasa a denominarse también de Competitividad.

En los ocho años que median entre estas responsabilidades, el papel de los ahora ministros ha sido muy diferente, ya que si Montoro ha sido la cara visible de la oposición económica al PSOE, De Guindos pasó esta travesía guarecido cómodamente en la empresa privada.

Por ejemplo, en febrero de 2006, dos años antes del derrumbe de Lehman Brothers, el nuevo ministro de Economía fue nombrado presidente ejecutivo del banco de negocios para España y Portugal.

Ahora será el encargado de sentar las bases de la reactivación del crecimiento económico y el empleo en España, y también de defender estas medidas a nivel internacional, ante los socios europeos y los grandes organismos internacionales.

Además, a partir de hoy el Ministerio encargado de las relaciones laborales deja de llamarse Trabajo por primera vez en democracia para empezar a denominarse Empleo y de Seguridad Social.

Otra novedad es que por primera vez se coloca al frente a una mujer, Fátima Báñez.

La hasta ahora diputada ha sido estos años la discreta mano derecha de Montoro y la más estrecha colaboradora de Soraya Sáenz de Santamaría, y salta a un primerísimo plano con el delicado encargo de dirigir la reforma laboral, uno de los pilares del nuevo Gobierno.

Habrá un Ministerio de Industria, Energía y Turismo, encabezado por José Manuel Soria, en tanto que el Ministerio de Fomento tendrá al frente a Ana Pastor y el titular de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente será Miguel Arias Cañete.

Los seis nuevos ministros, liderados por Montoro y De Guindos, asumen sus nuevas responsabilidades en un contexto que "no puede ser más sombrío", tal y como lo definió Rajoy en su discurso de investidura, ya que la economía española se encuentra al borde de una nueva recesión.

El principal reto al que se enfrentan es el de lograr estimular el crecimiento y generar puestos de trabajo que disminuyan una tasa de paro del 21,5 % y un volumen de desempleados cercano a los cinco millones.

Todo ello sin saltarse el compromiso ineludible de reducir el déficit público del conjunto de las administraciones públicas al 4,4 % del PIB en 2012, lo que implica un recorte de 16.500 millones de euros.

En manos de Montoro está la tarea más urgente, que será la de llevar al Consejo de Ministros del 30 de diciembre un decreto ley de medidas urgentes en materia económica, que incluirá la prórroga de los presupuestos e irá acompañado de un acuerdo de no disponibilidad.

El decreto incorporará la actualización del poder adquisitivo de las pensiones contributivas, congeladas en 2011, en la que será la única partida de gasto que el Gobierno tiene la intención de aumentar en 2012.

El siguiente cometido será la elaboración de un cuadro macroeconómico ajustado a la situación actual, sobre el que confeccionará los presupuestos generales del Estado para 2012 que el Gobierno tiene la intención de presentar antes de que acabe el primer trimestre.

En paralelo, todos los ministerios económicos deberán ir preparando las reformas que les correspondan, entre ellas la del mercado laboral, el sector financiero o la administración pública, así como las medidas de apoyo a emprendedores, de innovación para la empresa o de fomento el turismo.