Las principales asociaciones de víctimas del terrorismo calificaron como un "fraude" el comunicado de ETA en el que anuncia "el cese definitivo de su actividad armada", ya que esperaban que la banda comunicara su disolución y entregara las armas.

La presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Ángeles Pedraza, aseguró que el comunicado es "más de los mismo" y sólo "un paso más en el lenguaje" de ETA, que supone una nueva oportunidad para que los terroristas sigan hablando de "conflicto" y de "negociaciones".

"Era muy fácil decir que se disolvían, que entregaban las armas, que pedían perdón a las víctimas y que cumplirían con la justicia. Esto sí habría sido una buena noticia", añadió Pedraza.

La presidenta de la AVT subrayó que las víctimas no estarán dispuestas a que haya cesiones a los terroristas "jamás".

En esta línea, Voces contra el Terrorismo consideró que el anuncio "no tiene ninguna credibilidad" porque la banda no ha anunciado su disolución, sino un cambio de estrategia.

Para su presidente, Francisco José Alcaraz, el paso dado ayer por los terroristas "es fruto de un proceso soterrado" que conduce a un final en el que "los vencidos son las víctimas y los vencedores, los asesinos de ETA".

El presidente de la asociación Dignidad y Justicia, Daniel Portero, también coincidió en calificar como "un fraude" el comunicado de ETA porque, a su juicio, lo que realmente debían haber anunciado es su disolución y no un cese definitivo de la actividad armada, algo que no han hecho porque "los que lo anuncian no se han entregado y están en la clandestinidad".

"Es más de lo mismo, porque la disolución exige una entrega de las armas y los zulos que los terroristas no han llevado a cabo", explicó Portero, que consideró que este anuncio demuestra que "se están dando pasos hacia unas negociaciones claras entre el Gobierno socialista y la banda terrorista".

Portero, hijo del fiscal asesinado por ETA Luis Portero, añadió además que desde su asociación van a pedir a la Fundación de Víctimas del Terrorismo -presidida por Maite Pagazaurtundua- que convoque una reunión para todos los colectivos de víctimas "para formalizar una postura común" entre todos.

Irene Villa, quien sufrió la amputación de las piernas tras la explosión de una bomba de ETA cuando tenía doce años, dijo ayer que el anuncio de la banda es un paso más, pero agregó que de los terroristas se fía poco. Agregó que por ningún lado ha visto que hayan dejado las armas.