El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, anunció ayer que su partido, si gana las elecciones del 20-N, aspira a crear tres millones y medio de puestos de trabajo gracias a la irrupción de un millón de nuevos empresarios.

Pons, en rueda de prensa en la sede del PP, confirmó que los populares efectivamente estudian llevar a cabo una reforma fiscal basada en la redistribución de las cargas y en que la clase media no soporte la mayor parte del peso impositivo. Más que subir impuestos, según Pons, es perentorio "reorganizar el sistema fiscal" y poner el acento en la competitividad y en la mejora de la recaudación.

Lograr más competitividad pasa por crear empresas, es decir por favorecer que un emprendedor monte su proyecto en poco tiempo y sin tantos gastos.

Por ello, el gran objetivo de esa reforma fiscal que estudia el PP es favorecer la creación de empresas, que son las que crean trabajo. "Para que haya un nuevo millón de empresarios, hay que facilitar fiscalmente la creación de empresas y fiscalmente favorecer la emancipación y aparición de autónomos".