El ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, considera que, gobierne quien gobierne, la próxima legislatura reclamará grandes acuerdos entre PSOE y PP "en todo", ya que está convencido de que harán falta consensos colectivos de país para llevar a cabo reformas estructurales.

En una entrevista concedida a Efe, Jáuregui advirtió de que la tarea reformista "no ha terminado" y deberá seguir en la próxima legislatura, en la que "España está llamada a abordar algunas reformas profundas e importantes, porque llegan nuevos tiempos".

Para absorber el "enorme" paro, para que la economía española sea más competitiva, para agilizar la administración y evitar duplicidades, entre otras cuestiones, harán falta "grandes acuerdos colectivos como país", zanjó el ministro.

Unos grandes acuerdos que no han sido posibles durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero porque no ha habido "ninguna oportunidad de pactar nada con el PP", un partido que "desde el minuto cero ha hecho una política de oposición feroz".

"Ante las urgencias más dramáticas del país, el PP se ha negado sistemáticamente a entenderse con el PSOE", se quejó Jáuregui, y avisó de que, si se hubieran aplicado las recetas del partido de Mariano Rajoy, España hubiera estado "condenada al rescate".

Ese acuerdo entre PSOE y PP debería ser necesario, por ejemplo, para reformar las diputaciones provinciales, un asunto en el que su apuesta es "ser valientes" y plantear "una reforma profunda" para "suprimir una exagerada estructura institucional".

Ahora bien, precisó que eso es algo que hay que hacer de acuerdo con las comunidades autónomas, que deberían asumir las funciones de las diputaciones, y con un gran consenso entre partidos. Y es que, de acuerdo con sus apreciaciones, no se puede hacer una reforma de tal calado "con la idea de un solo partido", apostilló.

Del mismo modo, el ministro quiso dejar claro que "el Gobierno gobierna hasta el 20 de noviembre en plenitud" y que su voluntad es "hacer las cosas que hay que seguir haciendo", porque "la vida sigue", sentenció.

Prueba de ello es que el 26 de agosto habrá otro Consejo de Ministros, que probablemente aprobará otro decreto ley con nuevas medidas, en este caso de carácter laboral, que será convalidado por el pleno del Congreso en septiembre, en periodo ordinario de sesiones.