Tras felicitar a Estados Unidos por la liquidación del líder de Al Qaeda, Osama bin Laden, en Pakistán, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha justificado su celebración porque es "un destino buscado" por el terrorista "después de su sanguinaria trayectoria". Ahora que Bin Laden está muerto, el papel de las tropas en Afganistan ha salido a relucir este miércoles en el Congreso, aunque el líder socialista ha zanjado la cuestión aludiendo al plan de retirada de la OTAN. Así, Zapatero ha negado la salida de las fuerzas españolas del país árabe hasta "garantizar la seguridad" del pueblo afgano.

"Es muy probable que el destino de Bin Laden sea un destino buscado por él mismo después de su sanguinaria trayectoria", ha defendido Zapatero en la sesión de control al Gobierno que se ha celebrado este miércoles en el Congreso de los Diputados. El jefe del Ejecutivo respondía así a una pregunta de Gaspar Llamazares en la que el diputado de Izquierda Unida (IU) quería saber si seguía manteniendo que hay que felicitar a Estados Unidos por el "asesinato extrajudicial" del terrorista yihadista.

La primera reacción del Gobierno a la noticia de la muerte del líder de Al Qaeda fue elogiar a la administración del presidente norteamericano, Barack Obama, por acabar con Bin Laden en Pakistán. Dos días después, de cara al resto de grupos parlamentarios, Zapatero explicaba que, "como todo demócrata", le habría gustado que el terrorista hubiera "respondido ante la justicia". No obstante, ha considerado "fácil de entender" que un "criminal" de sus características "en una operación de esa naturaleza" acabara como acabó.

Con la reacción de la comunidad internacional por delante, el presidente ha defendido que la desaparición de Bin Laden "favorece la seguridad y la lucha contra el terrorismo internacional" por tratarse de uno de los "criminales más sangrientos de la historia". Sin embargo, en respuesta a la pregunta de Llamazares acerca de si va a ordenar la retirada de las tropas españolas de Afganistán tras la eliminación del terrorista perseguido desde los atentados del once de septiembre de 2001, el jefe del Ejecutivo socialista ha dicho que no.

Una vez más ha puesto a un organismo internacional por delante para explicar que las tropas permanecerán en Afganistán para "garantizar la seguridad" y el "futuro" de un país "democrático". Así, Zapatero ha recordado que existe un plan de retirada de la OTAN que se irá concretando de manera que la competencia sobre la seguridad se vaya transfiriendo paulatinamente a los afganos, lo que ha esperado que pueda producirse "cuanto antes".

IU: "INCLUSO LA GUERRA TIENE REGLAS"

Los argumentos del líder socialista no han convencido al diputado de IU, quien ha señalado que no reconoce a Rodríguez Zapatero, al que ha recordado que "el terrorismo de Estado no es una forma legítima de lucha contra el terrorismo". Llamazares ha subrayado que "incluso la guerra tiene reglas y en este caso no ha habido ninguna".

"No se puede asesinar premeditadamente aunque sea a un terrorista. No se puede violar el territorio de un país aunque sea para buscar a un terrorista. No se pueden eliminar pruebas ni ejercer el escarnio con el cuerpo del asesinado. Nada de eso tiene nada que ver con la moral ni con el derecho internacional", ha denunciado.

Sólo en dos puntos la coalición de izquierdas coincide con la postura del Gobierno socialista: en la "solidaridad" con las víctimas de los atentados del 11-S en Estados Unidos, aunque añadiendo los del 11-M en Madrid tres años después porque, tal y como explica, "el monopolio de las víctimas no lo tiene el imperio"; y en el "compromiso de la comunidad internacional en la lucha contra el terrorismo".

Sin embargo, en este último punto ha matizado que IU defiende que esa lucha "no se haga al margen de la legalidad internacional", como interpreta que ha ocurrido con la operación contra Bin Laden, carente además de una "mínima moral". En esta línea, Llamazares ha dudado que con la muerte del cerebro de la red de terrorismo yihadista se esté más cerca del fin de Al Qaeda. Lo que sí ha provocado su aniquilación es una "disminución de la altura moral y democrática de la lucha contra el terrorismo", ha considerado.

LA DOBLE MORAL EN CUESTIÓN TERRORISTA

De "horror" ha tildado el PSOE el uso de la tortura, pero mantiene su felicitación a Estados Unidos por acabar con el terrorista yihadista Osama Bin Laden en una operación militar en Pakistán. De este modo se expresaba la secretaria de Política Internacional y portavoz del comité electoral del PSOE, Elena Valenciano, en declaraciones este miércoles desde la Cámara Baja.

Después de que el director de la CIA haya reconocido que se usaron "técnicas de interrogación coercitivas" para conocer el paradero de Bin Laden, la dirigente socialista se ha limitado a indicar que no tiene "ninguna información oficial de lo que ha sucedido". Para Valenciano la muerte del líder de Al Qaeda a manos de fuerzas especiales estadounidenses ha sido una "operación de lucha antiterrorista" contra uno de los terroristas "más peligrosos y sanguinarios" quien, además, "había declarado la guerra a Estados Unidos".

Por eso, ha estimado que "lo único que cabe" es felicitar al Gobierno norteamericano "por haber conseguido que desaparezca de la faz de la tierra" y, aunque, tal y como anteriormente había manifestado el jefe del Ejecutivo, ha asegurado que habría preferido la detención de Bin Laden, ha admitido que esto habría sido "bastante difícil".

LA LEGITIMIDAD DE LA CAPTURA DE BIN LADEN

El partido IU ha cuestionado la operación militar estadounidense que ha llevado a la muerte del fundador de Al Qaeda. Para ellos se trata de un acto de "terrorismo de estado". Así lo ha calificado el eurodiputado de IU, Willy Meyer, en una rueda prensa, al tiempo que ha señalado que la civilización "está dando pasos atrás dando por bueno una acción de terrorismo como esta ejecución extrajudicial por parte de la Administración americana".

"Nosotros no formamos parte de ese coro que aplaude este acto terrorista, y en España hubiera sido impensable que para perseguir a los responsables del 11-M hubiéramos bombardeado un país como Marruecos, arrasando pueblos y aldeas como se hizo en Afganistán", ha dicho Meyer para añadir que estas actuaciones "impiden soluciones democráticas en los países árabes" y ha descrito la ejecución como un "ataque frontal" contra el derecho internacional".

También ha apuntado que a los Estados Unidos "no le interesaba" sentar a Bin Laden ante los Tribunales, ya que el líder de Al Qaeda "es un producto de la Administración americana y sabe demasiado". Además, el eurodiputado ha hecho una comparación con el genocidio nazi y ha declarado que, en aquella ocasión, "se consiguió sentar en el banquillo a todos los criminales nazis", en referencia a los Juicios de Nuremberg.