El ex edil del Ayuntamiento de Marbella Pedro Román dijo ayer que habló con Juan Antonio Roca en 2001 sobre la viabilidad de una operación urbanística en la ciudad tras contactar con el alcalde, Jesús Gil, que le aseguró que se podían construir apartamentos en la parcela, clasificada como comercial. Gil le dijo que el que conocía "ese asunto" era Roca, entonces gerente de la empresa municipal Planeamientos 2000, y que fuese a hablar con él, señaló Román durante su declaración en calidad de imputado en el juicio del "caso Malaya".

Román puntualizó que Roca le comentó que Gil le había llamado y le dijo que la sociedad que quería invertir en esa parcela tenía que pagar 240 millones de pesetas (1,44 millones de euros) y que le advirtió: "Si os interesa bien y si no, fuera".