Los secretarios generales de CCOO y de UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, presentaron hoy el centenar de actos conjuntos que celebrarán en toda España, de los que 80 serán manifestaciones, bajo el lema "Por el empleo con derechos y la garantía de nuestras pensiones".

Méndez subrayó que los actos de este año se desarrollarán en un contexto de fuerte recesión económica, con un grave aumento del paro y unas expectativas de "extrema debilidad" de la recuperación económica a corto plazo.

En una situación así, el diálogo social es "un buen instrumento" contra la crisis, aunque subrayó que un cambio de normas laborales tiene un impacto "muy limitado" en la lucha contra la recesión.

Méndez consideró urgente y necesario que se recuperen los flujos de créditos a familias y a pymes y, en este sentido, señaló que los cambios del sector financiero deberían haberse hecho "con mucha más diligencia".

Advirtió sobre los efectos negativos de la retirada de estímulos fiscales en la recuperación económica y el empleo, y afirmó que la mayoría de los países de la UE no podrá cumplir con los objetivos de alcanzar un 3% de déficit en tres años.

Méndez insistió en la necesaria reforma fiscal que aumente la capacidad recaudatoria de las Administraciones Públicas y se recupere el principio de equidad.

Ante la crisis de Grecia, abogó por una respuesta "europea" de defensa a un proyecto europeo, lo que exige que la UE plantee una política que dé respuesta "firme, serena y enérgica" a la especulación de los mercados financieros.

Dijo que las diferencia entre Grecia y España son "abismales" pero que se pretende utilizar la crisis griega para "intensificar" las exigencias de que se imponga "una cirugía de hierro en términos de un duro ajuste laboral", y advirtió de que los sindicatos se opondrán "rotundamente" a esas pretensiones.

A su vez, Toxo subrayó que la crisis exige intensificar esfuerzos para intentar que en la salida de la misma no se produzca un deterioro de las condiciones de vida y trabajo y una menor protección social o laboral.

Tras recordar a los trabajadores de Haití y Chile, Toxo hizo referencia a la próxima Cumbre del G-20 en Canadá e indicó que el 1 de mayo es una buena ocasión para recordar a los países más avanzados la necesidad de cumplir con los compromisos adquiridos en la anterior cumbre de Londres.

Señaló que tras la alarma de entonces y el anuncio de cambios hoy los sectores culpables de la crisis dominan de nuevo la escena política y económica.

Advirtió de que si no se regula el sistema financiero y se aplica la tasa internacional a las transacciones "el mundo será presa de los mercados, como ha pasado en Grecia.

Respecto a la crisis griega, acusó a la UE de tener una actitud rayana en "lo irresponsable y autodestructivo", porque no se puede dilatar la solución y dejarla "al albur de las decisiones de los mercados" ya que puede "contaminar al conjunto de los países de la unión.

"Quien piense que solo afecta a países con más déficit, como Irlanda, Portugal o España se equivoca", aseveró.

Afirmó que no es "sostenible" un plan de austeridad como el que ha elaborado el Gobierno sin que tenga "costes", y subrayó que un objetivo "de primera magnitud" debería ser la persecución del fraude fiscal y la economía sumergida.

Defendió la protección de los trabajadores y, en referencia a la pretensión de la patronal de rebajar las cotizaciones a la Seguridad Social, dijo que "nadie va a justificar" que alguien quiera reducirlas ya que un punto de rebaja supondría una pérdida de ingresos que sería necesario compensar con la creación de no menos de 500.000 puestos de trabajo.