La Justicia portuguesa falló ayer a favor de la entrega a España de tres presuntos etarras, aunque uno de ellos, sospechoso de montar uno de los mayores depósitos de explosivos de ETA, deberá ser primero juzgado en suelo luso.

En tres sentencias separadas, una del Tribunal de Relación de Lisboa y dos del Supremo, la Justicia lusa decidió que Garikoitz García Arrieta, Iratxe Yáñez Ortiz de Barrón y Andoni Zengotitabengoa sean entregados a España, aunque este último deberá primero responder de sus delitos en Portugal.

Fuentes del Tribunal Supremo dijeron ayer que sólo la sentencia de Yáñez Ortiz de Barrón podría ser apelada ante otra instancia judicial, el Constitucional

El letrado luso José Galamba, defensor de los acusados, declaró que ya tiene las sentencias y que, antes de hacerse efectiva la entrega, debe resolverse otro trámite judicial y su posible apelación ante el Constitucional.

La decisión del Supremo sobre García Arrieta y Yáñez Ortiz de Barrón se conoció el mismo día en que el Tribunal de Relación aceptó la entrega a España de Zengotitabengoa, pero después de que responda de los delitos que se le imputan en Portugal, donde es sospechoso de montar el almacén de explosivos de ETA hallado en Obidos, a unos 100 kilómetros al norte de Lisboa.

Intentaba huir a Caracas

Este presunto miembro de la banda terrorista de ETA fue detenido el pasado 11 de marzo en la capital lusa cuando intentaba huir a Caracas, disfrazado y con un pasaporte mexicano falso.

La Policía lusa busca todavía a su compañero Oier Gómez Mielgo, que vivía con él en la casa de la localidad turística de Obidos donde apareció, el 4 de febrero, alrededor de una tonelada de explosivos.

Por su parte, Ortiz de Barrón y García Arrieta fueron detenidos en Portugal el pasado 9 de enero, tras huir de un control policial español cerca de la frontera cuando trasladaban hacia suelo luso una furgoneta con explosivos y artefactos para fabricarlos.

El 25 de febrero el Tribunal de Relación de Lisboa decidió entregar a ambos a España en cumplimiento de una orden de detención emitida por la Audiencia Nacional española, pero Galamba presentó ante el Supremo la apelación sobre la que ahora se ha fallado.

Además del posible recurso al Tribunal Constitucional, el abogado explicó que antes de que se haga efectiva la entrega a España de estos dos acusados debe emitirse otra sentencia del Tribunal de Relación.

Este organismo tiene que pronunciarse sobre la decisión del Tribunal Central de Instrucción Criminal (TCIC) de inhibirse a favor de la Justicia española en su proceso contra García Arrieta y Yáñez Ortiz de Barrón para que sean juzgados en España por los cargos que tienen en Portugal.

El mismo Tribunal de Relación decidió ayer que Zengotitabengoa, una vez responda de sus delitos ante la Justicia lusa, sea entregado a España para cumplir los once años y seis meses de prisión a los que está condenado allí por actividades violentas relacionadas con la organización terrorista ETA.

Delitos de robo

Al contrario que Zengotitabengoa -procesado en Portugal por práctica, adhesión y apoyo al terrorismo- los otros dos presuntos etarras sólo están acusados de come- ter en este país los delitos de robo, uso de documentación falsa y resistencia a la autoridad.

La Policía sospecha que el destino de la furgoneta que trasladaban a Portugal García Arrieta y Yáñez Ortiz de Barrón era el chalet de Obidos donde la organización terrorista había montado uno de los mayores polvorines hallados en toda su historia.

Entre otros explosivos, la casa guardaba 300 kilos de bombas listas para ser usadas y planos de ciudades españolas y tanto las autoridades de Madrid como las de Lisboa consideran que el hallazgo de este depósito impidió que se cometieran atentados en suelo español.

El Gobierno portugués reforzó su cooperación con España a raíz del hallazgo de los explosivos y la detención de los tres supuestos etarras, y ambos países constituyeron la semana pasada un equipo conjunto de trabajo policial que tendrá, entre sus cometidos específicos, la lucha contra el terrorismo de ETA.

En las últimas semanas se han producido varias reuniones entre los ministros y secretarios de Estado responsables de las carteras de Interior de España y Portugal para coordinar esfuerzos contra las actividades de la organización terrorista en Portugal.