El líder del PP, Mariano Rajoy, aprueba los cambios que se han producido dentro del partido en la Comunidad Valenciana a instancias del presidente, Francisco Camps, toda vez que ayudan a erradicar "la incertidumbre" que se había creado en la dirección de los populares valencianos.

Los cambios colocan a Antonio Clemente como secretario general del partido en Valencia, a Rafael Blasco como portavoz del grupo parlamentario, a José Císcar como vicesecretario de la formación, a Alberto Fabra como coordinador general y a Juan Cotino como coordinador entre la organización y el Consell.

La dirección nacional encabezada por Rajoy "avala" tales modificaciones en la estructura del PPCV, y más cuando la iniciativa de Camps contó con el respaldo de prácticamente todo el Comité Ejecutivo Regional. Sólo se registraron cuatro votos en contra, entre ellos el del presidente del partido en Alicante, José Joaquín Ripoll.

Tanto Rajoy como su "número dos", María Dolores de Cospedal, han presionado a Camps durante las últimas fechas para que acometiera una serie de cambios en el partido y a ser posible en el Consell.

Sólo han logrado lo primero, pero la dirección nacional, por lo que apuntan las fuentes consultadas, se da por satisfecha.

El objetivo de Rajoy y de De Cospedal consistía en convencer a Camps de que diera a los efectos del "caso Gürtel" una respuesta de mayor calado político.

Primero le obligaron a sustituir al ex secretario general Ricardo Costa por su presunta vinculación con la trama corrupta en la Comunidad Valenciana, a lo que Camps cedió tras varias disputas.