El portavoz de ERC en el Congreso, Joan Ridao, insistió ayer en que su formación va a estar "muy vigilante" para que la "letra pequeña" del acuerdo sobre financiación autonómica se traslade "milimétricamente" a las leyes que regularán el nuevo modelo y avisó al Gobierno y al PSOE de que, pese al pacto sobre esta materia, "no pueden dar nada por hecho" sobre un hipotético respaldo parlamentario a los Presupuestos Generales del Estado.

Así , Ridao dejó claro que va a velar para que este acuerdo tenga un reflejo en otros temas como las cuentas públicas para 2010, la reforma de la Ley de Financiación de las Comunidades Autonómas (LOFCA) y la Ley de Cesión de Tributos.

Por su parte, el vicepresidente del gobierno de la Generalitat, Josep Lluís Carod-Rovira, aseguró que el ejecutivo catalán "está en el momento de su máxima fortaleza" interna, tras lograr el acuerdo de financiación y de estar desplegando su actividad legislativa.

Mientras, el presidente de CiU, Artur Mas, denunció el "self service" que ha supuesto el acuerdo de financiación, del que las comunidades han dado a conocer las cifras "que más les han convenido", por lo que ahora los números del Gobierno "no cuadran".

Por otro lado, la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, consideró ayer que cuando la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, critica el nuevo sistema se ponen de manifiesto dos cosas: "O bien ignora los pormenores del modelo, o que quiere mentir a los ciudadanos".

Por último, la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, pidió a los dirigentes populares que sean "prudentes" en su declaraciones sobre la financiación autonómica, puesto que cree que "quien está haciendo las cosas mal es el Gobierno de Zapatero, no Cataluña ni los catalanes".