Los sindicatos policiales formalizaron ayer en el Tribunal Supremo (TS) su anunciada querella por injurias y calumnias contra el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, y criticaron al director general de la Policía y la Guardia Civil, Francisco Javier Velázquez, por "darle la razón".

En una rueda de prensa en la que informaron de los detalles de la querella presentada ayer en el registro del TS, los sindicatos denunciaron la "animadversión" que tiene Pumpido hacia la Policía, lo que "le inhabilita e incapacita para seguir un minuto más a la cabeza de esta alta institución del Estado".

Tras pedir el cese de Pumpido, el portavoz de los cuatro sindicatos en unidad de acción, José Ángel Fuentes Gago, criticó duramente la actitud "reprobable" de Velázquez, que, lejos de rectificar al fiscal general, "corrió a hacerse la foto con Pumpido para dar por cerrada la cuestión". Los sindicatos -SUP, CEP, UFP Y SPP- criticaron que Velázquez "no saliera en defensa" de los policías y, por contra, afirmara que había existido un "error procedimental" en la actuación de la Policía en los procesos de ilegalización de formaciones políticas del entorno de ETA.

"No ha habido ningún error procedimental. Es mentira lo que dijo Pumpido y es mentira lo que dijo el director general apoyándole", denunció el líder del SUP, José Manuel Sánchez Fornet, quien exigió explicaciones convincentes al "número tres" de Interior o de lo contrario que "depure su propia responsabilidad". Velázquez tendrá la oportunidad de ofrecer las oportunas explicaciones a los sindicatos en la reunión de Consejo de la Policía que se celebrará mañana.

Los sindicatos lamentaron también que el ministro Rubalcaba eludiera la polémica y no se contactara con ellos para expresar su solidaridad ante las graves acusaciones del fiscal general.

"Ha dado por bueno lo dicho por Pumpido", denunciaron las centrales, que insistieron en pedir el cese inmediato del fiscal general del Estado, "incapacitado para tan alta responsabilidad".