Hace ya tiempo que la economía lagunera se convirtió en uno de los grandes asuntos del rifirrafe político local. La deuda, interpretaciones antagónicas del período medio de pagos, las contrataciones... Esta semana, un nuevo ejemplo. Tras conocerse la auditoría del Fondo Canario de Financiación Municipal para 2015 y las valoraciones en clave de celebración por parte de la edil de Hacienda y del alcalde, el líder de XTF-NC, Santiago Pérez, realizó ayer otra lectura de lo que calificó de "economía de guerra".

En rueda de prensa, el veterano político lamentó las "palabras gruesas" utilizadas por los nacionalistas para referirse a los análisis al respecto de la oposición, y armó su discurso sobre media docena de cifras: el superávit por operaciones corrientes fue de 22,3 millones de euros, frente a los 5,13 del pasado año, un 334,8% más, en lo que entiende como un ahorro excesivo; un esfuerzo fiscal situado un 18% sobre la media de los municipios canarios; una subida de la presión fiscal por habitante de 548 a 617 euros; una bajada en la compra de bienes y servicios entre 2012 y 2015 de alrededor de unos 20 millones; otra caída de un 22,5%, en este caso en transferencias corrientes, "que son las que suelen otorgarse a entidades deportivas, humanitarias y sociales", y una ejecución presupuestaria que, dijo, es insuficiente: 7,09 millones de euros en contraposición a los 12,2 consignados. "Para mí esto es la realidad de las cosas y lo demás son vainas propagandísticas", cerró.