El solar en el que se encontraba el edificio Francisco Javier Centurión, en la zona de San Honorato, permanece vallado y sin uso varios meses después de haber sido demolido, si bien estaba prevista allí la creación de un aparcamiento que permitiese compensar los que se han perdido con la construcción del nuevo bloque, según habían dicho desde el ayuntamiento el pasado marzo y reafirmaron ayer al ser preguntados.

Se trata, específicamente, de un espacio que albergó una urbanización desde la década de los 50 del siglo pasado, pero que se acabó viendo afectada por la aluminosis. Aquello dio paso a una prolongada lucha, hoy cercana a su final con la edificación de las nuevas viviendas.