El Cabildo anunció en febrero la redacción este año del proyecto integral de mejora del camino de San Francisco de Paula, también conocido como la carretera de Los Baldíos, por un importe de 18.000 euros; sin embargo, desde la zona señalan que hay medidas básicas para la seguridad, sencillas de ejecutarse, que se podrían realizar previamente.

Vecinos de este enclave lagunero se detienen en primer lugar en la parada de guaguas sin protección contra los coches a la salida de la avenida de El Centenero, así como en la ausencia de un espejo visor en ese mismo punto, lo que, sostienen, obliga a muchos conductores a circular hacia La Laguna, para dar la vuelta en la gasolinera próxima y cambiarse al sentido opuesto, como forma de no salir "a ciegas".

Esas demandas y el resto tienen que ver con las singularidades de la vía, recta y en la que es habitual que los vehículos alcancen velocidades elevadas. Es precisamente por eso que la siguiente reivindicación pasa por la instalación de un paso de peatones entre la antes citada estación de servicio y un supermercado, que entienden que es fundamental. ¿Por qué? Aparte de hay quienes cruzan por otros motivos, detallan que se da la circunstancia de que a una parte del barrio no accede el camión de la basura -a calles como Matías de La Rosa o la Capiroña Zapatera-, por lo que utilizan ese punto para acercarse a los contenedores de basura que están en el margen contrario.

Las marquesinas y su protección vuelven a adquirir protagonismo unos metros más hacia adelante, en la entrada del camino de La Zanca. Allí, afirman los residentes, ha ocurrido en varios casos que vehículos han frenado para desviarse, ha habido accidentes por alcance y el automóvil de delante se ha chocado contra la protección de la parada de guaguas, como atestigua el hierro golpeado. La solución que proponen: trasladar estas marquesinas.