El Ayuntamiento de La Laguna apuesta por comprar productos frescos por entender que aportan al ciudadano salud. Para ello, ha editado una guía de venta directa de las adquisiciones agrícolas y ganaderas del municipio, cuyo objetivo es que los ciudadanos adquieran, por ejemplo, frutas, verduras, carne, huevos o quesos directamente de quienes lo han producido.

La publicación nos acerca a las bodegas, granjas o fincas, cooperativas y mercadillos del agricultor del municipio.

El ayuntamiento con la guía quiere dar respuesta a uno de los problemas con el que se encuentra cotidianamente el ciudadano que quiere consumir alimentos generados localmente y comercializados directamente por su productor, como es el de la enorme dificultad para saber quiénes son y dónde están.

Lo novedoso de la publicación es que el usuario no solo podrá encontrar en la guía las direcciones de los puntos de venta, sino un código que le permitirá, a través de su Smartphone, ser dirigido vía GPS hasta el establecimiento al que desee ir.

El Ayuntamiento de La Laguna y la organización profesional agraria COAG Canarias han aunado esfuerzos para editar la guía y dar respuesta a la pregunta de si comprar en grandes superficies frutas o verduras producidas en otras partes del mundo suele ser visto como algo normal que, en ningún caso, podría tener consecuencias negativas contra la salud de los consumidores o el sistema socioeconómico local. La respuesta que se da es que "lamentablemente la realidad no es cien por cien así. Dicho de una manera más diplomática, consumir productos frescos locales directamente a productores locales genera muchos más efectos positivos al consumidor que comprarlos de procedencias más lejanas en alguna de las grandes superficies".

Por ello, el ayuntamiento destaca que el principal atributo de los productos locales se relaciona con una mayor frescura y ésta con una menor pérdida de propiedades nutritivas y aromáticas. "Es decir -se precisa-, un producto con mayor concentración de nutrientes y mejores propiedades organolépticas. Los productos que son traídos de la Península o de otros países generalmente pasan días o semanas entre su recogida y su punto de venta final, siendo muchos de ellos sometidos también a tratamientos de maduración y conservación que merman sus propiedades".

La guía hace retroceder al ciudadano en el tiempo y, al acudir a comprar productos a la finca de quien los produce, logra que valore el esfuerzo que representa el cosechar y conocer cómo se hace. Por lo tanto, la guía consolida las relaciones sociales y se regresa a casa con productos frescos y una experiencia.