La Laguna posibilitó el reciclado de unos 720 kilogramos de bombillas fluorescentes y bajo consumo durante el año 2013, que se corresponden con unas 3.500 lámparas, gracias a la implicación de la Concejalía de Servicios Municipales, que dirige el primer teniente de alcalde, Javier Abreu, y la empresa encargada del mantenimiento de alumbrado público, Effico.
Esta acción, que pretende promover una gestión adecuada para mejorar la eficacia de la protección ambiental de las lámparas contaminantes, cumple con la directiva comunitaria del Parlamento Europeo y el Real Decreto de ámbito nacional sobre residuos de aparatos eléctricos y electrónicos y la gestión de sus residuos.
Javier Abreu señala que uno de los objetivos del Plan de Ahorro Energético (PAE) es acabar con las lámparas de mercurio contaminantes “ya que dañan al medio ambiente”. Así, Abreu asegura que desde el inicio del mandato “se han ejecutado numerosos proyectos de sustitución de este tipo de lámparas, para proteger nuestro entorno y frenar, en la medida de lo posible, el cambio climático".
Según un estudio de la Asociación para el Reciclaje de Lámparas, Ambilamp, esta cantidad de bombillas, compuestas de mercurio, plástico, metal y vidrio, retiradas principalmente de dependencias municipales, equivalen al dióxido de carbono que emiten a la atmósfera 23 coches circulando durante día y medio, o el que más de 18.000 árboles tardan en absorber durante un año.
Punto limpio de Taco
El edil de Medio Ambiente de La Laguna, Javier Abreu, hace un llamamiento a la ciudadanía para potenciar el reciclado de bombillas fluorescentes o de bajo consumo, "para intentar suprimir residuos nocivos que afecten de forma negativa a nuestro entorno". Así, anima a los ciudadanos laguneros a dirigirse al punto de limpio de Taco, situado en la carretera general La Cuesta-Taco, para depositar este tipo de bombillas.
Cabe señalar que estas lámparas, si son depositadas en los contenedores convencionales, podrían ocasionar graves problemas a la cadena alimenticia y a los acuíferos, por poseer mercurio y otros componentes contaminantes. Si bien, sólo se pueden reciclar las bombillas fluorescentes, de descarga o bajo consumo, pero no las incandescentes o halógenas.